Las muertes por hambre, ante el bloqueo a la entrada de ayuda impuesto por Israel, siguen aumentando en Gaza. El Ministerio de Sanidad de la Franja, controlada por Hamás, ha informado este sábado de que ocho personas han fallecido por inanición en las últimas 24 horas, después de que la ONU decretara el viernes oficialmente la hambruna en el enclave. Dos de estas víctimas son bebés, incluyendo una niña de cinco meses con parálisis cerebral que murió al no poder ser amamantada por su madre, quien padece también desnutrición.

Desde octubre de 2023, cuando Israel inició su ofensiva, las autoridades gazatíes han registrado 281 muertos por hambre; 114 de ellos, niños. Pero la mayoría de estos fallecimientos (216) se han producido desde principios de julio de este año, indicando una crisis de mortalidad creciente.

El viernes, Naciones Unidas declaró oficialmente la hambruna en Ciudad de Gaza y otros territorios gazatíes. La organización internacional dio ese paso después de que la Clasificación Integrada de Seguridad Alimentaria en Fases (CIF, en sus siglas en español), el sistema internacional apoyado por la ONU que calibra la situación alimentaria en el mundo, publicara un informe en el que confirmaba la hambruna sobre el terreno.

Decenas de palestinos cargan sacos de harina repartidos por un convoy de ayuda humanitaria en las afueras de Beit Lahiya, en el norte de Gaza, este sábado.Decenas de palestinos cargan sacos de harina repartidos por un convoy de ayuda humanitaria en las afueras de Beit Lahiya, en el norte de Gaza, este sábado.Abdel Kareem Hana (AP/LaPresse)

Este sábado, distintas agencias de la ONU han señalado a Israel con más contundencia aún. “Es el momento de que el Gobierno de Israel deje de mentir sobre la hambruna que ha creado en Gaza”, protestaba en un comunicado el secretario general de la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos, Philippe Lazzarini. De manera similar, su organización ha reiterado que “revertir la catástrofe” está al alcance de la mano. “Nuestros almacenes en Jordania y Egipto están llenos. Tenemos bastante comida, medicinas y suministros higiénicos para llenar 6000 camiones. El Estado de Israel nos tiene que dejar repartir ayuda en Gaza”, ha apuntado.

El jefe de la acción humanitaria de la ONU, Tom Fletcher, ha ido un paso más allá. “Esta es una hambruna abiertamente provocada por algunos líderes israelíes como arma de guerra”, ha dicho. “La hambruna de Gaza es la hambruna del mundo. Una hambruna que nos pregunta: ‘¿qué hiciste tú?’. Y que nos debe perseguir a todos”. Fletcher ha concluido su comunicado con una súplica: “Basta”, le dice a Israel: “Por el bien de la humanidad. Déjennos entrar”.

El Ministerio de Sanidad gazatí ha agradecido la decisión de la ONU de declarar la hambruna, “aunque lo haya hecho tarde”. “La inanición provocada es un elemento más del genocidio, que también incluye la destrucción sistemática del sistema de salud”, denuncian los responsables de Sanidad palestinos. “Cientos de muertes se podrían haber evitado, y las vidas de miles más están en juego. La comunidad internacional se enfrenta a la hora de la verdad”, subrayan.