A pesar de que el sector de la compraventa de coches ha cambiado radicalmente en España a lo largo de los últimos años, la realidad es que todavía hay algunos propietarios que intentan desprenderse de su vehículo a la vieja usanza, es decir, poniendo un papel en la ventanilla o en el parabrisas delantero indicando que ‘se vende’. Esta práctica era muy común hace tiempo, y aunque en la actualidad ya no se ven tantos automóviles con esos folios en los cristales, todavía hay algún propietario que lo hace.

Lo que no muchos saben es que llevar ese papel en el coche puede ser motivo de multa, y además por varios motivos. A pesar de que esto suele ser considerado como infracción leve, la realidad es que en una ciudad española se han puesto sanciones de hasta 1.000 euros a los conductores que han puesto su coche a la venta con este método, algo que no muchos conocen y que deberían tener muy en cuenta si planean hacerlo.

La multa por vender el coche en la calle

La primera razón por la que un propietario que ponga su coche a la venta en la calle puede ser multado es la visibilidad, ya que en el artículo 19.1 del Reglamento General de Circulación (RGC) se establece que «La superficie acristalada del vehículo deberá permitir, en todo caso, la visibilidad diáfana del conductor sobre toda la vía por la que circule», mientras que en el artículo 18 de dicha normativa se obliga al conductor a «mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción».

Por lo tanto, un agente regulador del tráfico puede considerar que un cartel de venta, si tiene un tamaño considerable, puede entorpecer la visión del conductor, es decir, no estar en condiciones de mantener el control total del vehículo, algo que está tipificado como infracción leve en el artículo 75 de la Ley de Tráfico. Esto conlleva una multa de 100 euros, aunque dicha cuantía podría ser mayor si se considera una venta ambulante no autorizada.

El caso de Vitoria, el más extremo

Eso sí, ha habido alguna otra ocasión que las multas por vender el coche en la calle han alcanzado los 750 euros e incluso los 1.000 euros, y todas ellas han sucedido en la ciudad de Vitoria. La ordenanza municipal afectó a varios usuarios no hace mucho tiempo, y aunque muchos destacaron la falta de proporcionalidad de las sanciones, lo cierto es que se interpusieron y dejaron totalmente boquiabiertos a los propietarios de esos vehículos.