Final amargo y precipitado para el aragonés Jorge Arcas en La Vuelta a España. El ciclista del Movistar se ha visto obligado a abandonar el pelotón después de sufrir una dura caída en la segunda etapa, la de este pasado domingo entre Alba y Limone Piemonte (Italia), que se produjo a menos de 24 kilómetros de la meta y que afectó a una veintena de ciclistas, entre ellos a casi todo el equipo Visma del danés Vingegaard, que a pesar de todo teminó logrando la victoria de etapa y enfundándose el maillot rojo.
Arcas se sobrepuso de la caída y terminó cruzando la línea de meta en los últimos lugares, pero con evidentes dolores y aquejado de un dolor en la cadera. El corredor fue atendido por el servicio médico de La Vuelta y, posteriormente, fue ingresado en el CTO Ospedale de Torino, donde, tras practicarle diferentes pruebas, se le detectó una fractura en el fémur de su pierna izquierda, según ha informado el equipo Movistar en redes sociales.
«Tras la caída en la jornada de ayer, Jorge Arcas lo dio todo para finalizar la etapa. Ejemplo de tenacidad. Después de la asistencia y pruebas diagnósticas de ayer en la meta. Así como, de los estudios complementarios en el hospital, el serrablés presenta una fractura de la parte superior del trocánter mayor del hueso fémur de la pierna izquierda. Por lo que, Jorge Arcas se ve obligado a abandonar La Vuelta. Movistar Team agradece la atención recibida por parte del Servicio Médico de La Vuelta y del personal sanitario del CTO Ospedale de Torino», se puede leer en el post de X.
Arcas era uno de los cuatro aragoneses que integraban el pelotón de La Vuelta a España junto a Pablo Castrillo (también Movistar), Fernando Barceló (Caja Rural-Seguros RGA) y Sergio Samitier (Cofidis) y había concluido la primera etapa entrando con el grueso del pelotón, a 10 segundos del vencedor, el danés Jasper Philipsen.
El corredor de Sabiñánigo llegaba a la cita con la vitola de líder de equipo por su veteranía y bagaje en la Vuelta gracias a sus seis participaciones en la clásica española, un Tour de Francia (2021) y un Giro de Italia (2022). En declaraciones a este diario, Arcas decía sentirse cómodo en ese papel de veterano para «aportar a los jóvenes y ayudarles en cualquier momento de la carrera».