El piloto mexicano Sergio ‘Checo’ Pérez volverá a la parrilla de Fórmula 1 con Cadillac la próxima temporada y tendrá la posibilidad de medirse a su exequipo, Red Bull, al que dejó un ‘recadito’ en su presentación con su nueva escudería con mención a Yuki Tsunoda y Liam Lawson, los que han pasado por su asiento desde que se marchó.
Pérez, gran señalado en la escudería de las bebidas energéticas por sus pobres resultados paralelos a los grandes triunfos de Max, fue despedido de Red Bull, pero cree que nada tiene que demostrar visto los visto con sus sucesores.
«Siento que no hay nada que demostrar. No solo por los pilotos actuales, o los que estuvieron en mi asiento, incluso antes. Ahora todo el mundo se olvida de ello, pero ha sido un lugar muy complicado en el que estar, en el que debes adaptarte continuamente, construir confianza mentalmente. Es un reto único», dijo en primera instancia al ser preguntado al respecto.
Pero no se quedó ahí, pues también mando un recado a Tsunoda y Lawson: «No creo que tenga nada que demostrar cuando ves la cantidad de puntos que han conseguido. Son como cinco puntos en toda la temporada», les espetó.
Zanjado ese asunto, Checo aseveró que se encuentra feliz por el regreso al deporte: «No podía permitirme dejarlo como lo dejé, y por eso vuelvo con este nuevo proyecto. Espero que tenga mucho éxito. Pero entre eso, más que nada, quiero disfrutar de este regreso«, aseguró.