Los precios de la electricidad en España exprimen al máximo la paradoja del vaso medio lleno o medio vacío, cuando realmente se encuentra por la mitad. Durante este mes de agosto, a falta de pocos días para que acabe el mes, el coste del … mercado mayorista estará sobre los 60-70 euros el megavatio (€/MWh). Habrá quien piense, tras mirar a crisis pasadas, que se trata de un precio bueno. Otros, con el recuerdo de la primavera de 2024, creerá que se trata de una aberración. Un termómetro muy bueno es el comportamiento de las grandes compañías energéticas que andan metidas en una guerra comercial en busca de nuevos clientes.

Pese a que la competencia ha vuelto a aumentar; es decir, las comercializadoras independientes meten de nuevo presión, la realidad es que el mercado sigue copado por las grandes eléctricas a las que se ha unido Repsol con una pujanza cada vez mayor. Y es precisamente la petrolera una de las más activas para captar nuevos abonados.

La compañía dirigida por Josu Jon Imaz lo hace desde su factor multinergético —y con diversas marcas—. Su lema «suma energías y multiplica ventajas» se centra en ofrecer precios muy competitivos en el negocio de la luz, pero ligarlo también de forma clara con el transporte. No en vano sigue siendo el principal proveedor de combustibles de los españoles. Y no solo eso, sino que además la compañía suele regalar saldos directos (ahora tiene una campaña de 40 euros), junto a importantes descuentos a la hora de echar gasolina.

Esto tiene un reflejo: más de dos millones de clientes en luz y gas, y cada vez metiendo más presión a sus rivales. Además, ha incorporado nuevas marcas a su porfolio, algo que le permite otro tipo de estrategias a la hora de captar nuevos usuarios.

Pero no es la única que se mueve en diversas áreas de acción. Iberdrola, por ejemplo, entre algunas de sus promociones guarda ofertas cruzadas con otros negocios. Así, ofrece descuentos especiales al comprar en marcas seleccionadas como Dyson, Bosch, Goiko. Pero también incluye experiencias relacionadas con los Juegos Olímpicos para aquellos que se sumen a la compañía.

En estas estrategias de captación, algunos han decidido sumar fuerzas. Naturgy ha decidido aliarse a Moeve. La petrolera, que también intentó una aventura en el sector eléctrico, ha pensado que era mejor aportar sinergias con compañías que tuvieran mayor grado de maduración en el sector. Lo más curioso dentro de las promociones de la gasista es que, precisamente, confirma que los precios andan al alza. «Pausa la subida de la luz». Así reza uno de sus argumentarios para atraer nuevos clientes y ofrecer sus promociones.

En este caso lo hace con Moeve en materia de movilidad. El objetivo es que un cliente de luz o gas de la compañía, también se convierta en usuario de otros servicios aledaños. Por ello, pese a la incipiente entrada de los coches eléctricos, los motores de combustión siguen dominando. Y su coste es un gasto recurrente para las familias.

Endesa, por su parte, ahora mismo ofrece descuentos de hasta un 50% en las horas de más consumo. Una apuesta muy potente por parte de la eléctrica dirigida por José Bogas, y que demuestra que no quiere ceder más terreno. La compañía, como líder del sector, se ve siempre afectada por la agresividad comercial de los demás.

Pese a que las grandes eléctricas, sobre todo Iberdrola y Endesa, tienen el negocio de la comercialización en un segundo plano, puesto que su principal foco de atención son las redes de distribución, la realidad es que nadie quiere perder espacio. Básicamente, porque se trata de una puerta de entrada para otros negocios.

Un ejemplo inverso lo representa Masorange. La compañía resultante de la fusión de Orange y MásMóvil se ha convertido en una de las compañías que más crece en el negocio de la luz gracias a las múltiples marcas de comercialización que ha lanzado al mercado. Esto se debe a la capacidad de llegada que tiene sobre una base ya consolidada de usuarios en otros servicios.

Por tanto, que Iberdrola y Endesa quieran retener clientes se debe a la futura intención de poder ofrecer otros servicios, como por ejemplo puedan ser soluciones de autoconsumo, o de recarga de vehículos eléctricos, sobre una base de abonados ya existentes.

Nuevos entrantes

Tampoco se puede obviar en toda esta guerra los nuevos entrantes como Octopus, los que llevan ya un tiempo como Factorenergía o Feníe Energía, siguen animando el mercado. Asimismo, otros actores relacionados con el mundo petrolero a través de sus matrices, como TotalEnergies o Plenitude, cada vez están pidiendo más hueco.

En estos casos, muchas veces se hace con acciones de relaciones públicas, patrocinio de eventos, y cuestiones similares que ofrecen una mayor visibilidad a la marca. El objetivo final es que su nombre vaya calando en los consumidores para que, cuando llegue la oferta, tengan la referencia visual y la potencial confianza con una empresa de confianza.