Ilia Topuria sigue creciendo a un ritmo imparable y las comparaciones ya comienzan a tocar los nombres más pesados de la historia de la UFC.

Para Malki Kawa, presidente de First Round Management y hombre que maneja la carrera del campeón hispano-georgiano, no hay dudas: está destinado a superar a Conor McGregor como la máxima figura del deporte de las artes marciales mixtas.

“Si hoy no es la mayor estrella de la UFC, lo será en seis meses. Tiene todo: nivel, carisma, presencia, poder. Es un miniTyson. Y lo mejor es que ha conquistado Europa primero. Ahora le toca a Estados Unidos. Va a ser más grande que McGregor. Lo digo sin exagerar’’, afirmó Kawa con total convicción.

Las palabras del representante no son simples elogios vacíos. Detrás de ellas se esconde una estrategia clara: construir a Topuria como un producto global que no solo gane peleas, sino que también arrastre multitudes y domine mercados. Y hasta ahora, el campeón invicto ha cumplido con cada paso que le han puesto en el camino.

Europa es el ejemplo más claro. Allí, Topuria no solo llena estadios de fútbol con decenas de miles de fanáticos, sino que también ha logrado algo que parecía imposible: que España, tierra de fútbol por excelencia, ponga los ojos en la UFC.

Ese “camino inverso’’, como lo define Kawa, puede ser la clave de su impacto a nivel mundial.

“Seguro al ciento por ciento. No lo digo por decir. Estoy calculando lo que afirmo. Ya capturó Europa, ahora viene a dominar América. Cuando haces ese camino inverso —el mundial primero y luego América— el impacto es brutal. Tiene estilo, habla bien, noquea de forma espectacular, y su inglés ha mejorado mucho. Está haciendo todo lo necesario para convertirse en la próxima gran estrella global’, insistió el presidente de First Round Management.

La comparación con McGregor resulta inevitable. El irlandés revolucionó el deporte porque supo mezclar resultados con espectáculo, vendiendo cada combate como un evento irrepetible. Topuria, en cambio, ya tiene el aura de campeón invicto y se encuentra en el punto justo para dar el salto definitivo en el mercado estadounidense.

Si algo distingue a “El Matador’’ es su capacidad para hablar dentro y fuera del octágono.

A diferencia de muchos peleadores europeos que nunca terminan de conectar con el público americano, Topuria ha trabajado su inglés, ha pulido su discurso y ha aprendido a manejar la narrativa que rodea a cada combate. No se trata solo de ganar, sino de convencer, y en eso también está dando pasos de gigante.

Los fanáticos lo comparan con Mike Tyson por su estilo agresivo y su pegada, pero Kawa apunta más alto: quiere que su peleador no sea visto únicamente como un fenómeno deportivo, sino como un ícono cultural.

En un negocio donde la UFC vende tanto historias como golpes, Topuria tiene todos los ingredientes para convertirse en ese imán global que la compañía necesita en la era post-McGregor.

Lo cierto es que, más allá de las comparaciones, Ilia ya camina sobre una línea ascendente que pocos pueden frenar.

Su historia, su estilo y su impacto en mercados no tradicionales lo colocan como un proyecto único en la UFC. Y si su representante no se equivoca, lo que hoy parece una predicción audaz podría convertirse en realidad más pronto de lo que muchos esperan.

“El Problema Cubano” regresa a UFC Vegas 110 el 1 de noviembre en busca de su segunda victoria

El aullido del Lobo Checheno barre la mole africana con una gran lucha en la UFC 319

Ilia Topuria: el campeón que no tiene techo… pero sí muchas puertas abiertas