La subdirectora del Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MuVIM), Carmen Ninet, ha anunciado en nota interna remitida a sus compañeros su decisión de jubilarse en pleno proceso de investigación en la Diputación de Valencia tras no haber acreditado la titulación … necesaria para el puesto que todavía ocupa. El organismo provincial, conforme informó ABC, decidió hace un par de semanas amortizar su plaza y recolocarla en otra asignación «acorde a su formación», mientras trataba de averiguar si podría reducir también su sueldo.
No obstante, la mujer del excomisionado del Gobierno para la dana José María Ángel Batalla, quien también anunció su jubilación tras la apertura de una investigación de la Agencia Valenciana Antifraude por presentar un presunto título falso para promocionar hace décadas en la función pública, ha tomado la misma decisión que su marido y ha denunciado una campaña «orquestada» contra ambos.
En la nota interna, a la que ha tenido acceso ABC, Ninet anuncia su jubilación con fecha de este mismo 31 de agosto cerrando una trayectoria de más de cuatro décadas en la Diputación de Valencia. En la carta de despedida dirigida a sus compañeros, hace balance de su vida profesional, marcada por la gestión cultural y administrativa en diferentes áreas del ente provincial. «Más de cuarenta años de servicio público no pueden quedar ocultos tras un entramado de inexactitudes, tergiversaciones y silencios», subraya en su escrito, en referencia a la polémica sobre su falta de titulación para el cargo de categoría A1 que ocupaba hasta ahora. Su sueldo actual era de 87.754 euros brutos anuales.
Ninet ingresó en la Diputación en 1980, donde comenzó asumiendo funciones de jefa de Administración en la Plaza de Toros de València. Posteriormente ocupó diversos cargos de responsabilidad: fue gerente del Teatro Principal, directora del Servicio de Asistencia y Recursos Culturales (SARC), jefa de sección en el Centre Cultural La Beneficència -nombrada por la entonces diputada del PP María Jesús Puchalt- y en el propio MuVIM, institución en la que culmina su carrera como subdirectora.
Reconoce que no acabó Derecho
Asimismo, reconoce que no acabó la carrera de Derecho, pero defiende que su clasificación en la Diputación como personal laboral fue equiparada al grupo A en el año 1986, «como sucedió con otros muchos compañeros, de lo que hace ya treinta y nueve años», alega. «Así consta en mi expediente laboral y certificado por el secretario de la corporación; documentos a los que nadie, por supuesto, ha hecho referencia», lamenta.
En su despedida, recuerda que durante todos esos años no se registró «ni una sola queja» sobre su gestión y agradece el respaldo de los equipos con los que ha trabajado: «Entre todos hemos hecho posible el MuVIM que hemos llegado a ser: un museo referente y diferente, y el más visitado de Valencia».
La jubilación de Ninet se produce tras semanas de informaciones críticas que, según ella, responden a una «estrategia orquestada» para cuestionar su trayectoria y la de su pareja. La todavía subdirectora defiende que su expediente laboral acredita «sin lugar a dudas» su condición y dedicación como empleada pública, con más de doscientos documentos oficiales entre decretos, certificados y nombramientos.
En su carta, denuncia lo que califica como un intento de «difundir basura y denigrar para alzarse como el ‘salvador’ o la ‘salvadora’ de una situación de descontrol absolutamente falsa». A pesar del contexto, Ninet concluye su despedida con un tono optimista y agradecido. «Seguiré siendo feliz, porque tengo vida, amor y aficiones suficientes para seguir siéndolo», afirma, dedicando palabras de reconocimiento a sus compañeros del MuVIM, al personal de seguridad, mantenimiento y limpieza, y a todos aquellos que han formado parte de su recorrido profesional.
La diputación que preside el popular Vicente Mompó abrió un expediente de información reservada a la que fuera diputada autonómica del PSPV-PSOE en las Cortes Valencianas durante 16 años para solicitar información sobre su acceso al puesto de trabajo que ostenta actualmente. Los cinco días de plazo transcurrieron sin que Ninet aportara documentación, por lo que la corporación entendió que no disponía del título universitario, requisito fundamental para una plaza de libre designación A1, lo que ha ahora ha confirmado.
Pese a la intención de degradarla, los servicios jurídicos de la corporación llevaban meses estudiando si podría haber consolidado sus derechos retributivos como funcionaria A1, lo que le hubiese permitido seguir cobrando su sueldo actual pese haber desempeñado a partir de ahora un cargo de menor rango.
En 2012, el organismo provincial -entonces presidido por Alfonso Rus- aprobó una modificación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), mediante la que su puesto «reservado» de jefa de sección de Coordinación constaba «caracterizado como A1 24 B3 F CM S A1 901». En ese mismo documento, aparece recogido que la ahora señalada es «empleada pública en régimen jurídico-laboral en situación de excedencia forzosa por su designación para cargo público». En 2015 decidió reincorporarse a su plaza como jefa de sección en el Centro Cultural La Beneficiència y, un año después ya con la izquierda gobernando la institución, se modificó la RPT para nombrarla «subdirectora A1 26 B3 F LD S A1 901».
En diciembre de 2019 se aprobó la modificación de las características del puesto de subdirector respecto al complemento específico y al que se encontraba adscrita de forma provisional Ninet, «manteniendo inalterable el resto de su caracterización, debiendo suscribir la oportuna acta de aceptación», según rezaba el documento oficial. Un cargo que lleva aparejado un sueldo cuantioso con el que habría llegado a ganar más de 700.000 euros durante los últimos nueve años, de acuerdo con las tablas salariales establecidas por la Diputación.