El viernes se disputaba en Ciudad Real una nueva edición del Trofeo Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, en su modalidad de balonmano y, hasta el Quijote Arena, acudían los tres equipos que esta temporada disputarán la Liga Nexus Energía Asobal: el anfitrión BM Caserío Ciudad Real, el Rebi BM Cuenca y el Sanicentro BM Guadalajara.
Trío de representación castellanomanchega que se jugaba, en formato triangular, el título que ya consiguieran los de Guadalajara la pasada pretemporada, en Azuqueca de Henares.
Con la ausencia del míster Juan Carlos Requena, por motivos personales, Ricardo Mateo se ponía a los mandos del equipo alcarreño para dirigirlo en sus dos encuentros, primero frente a los conquenses y después sería el turno de los anfitriones.
El formato se establecía en dos partes de 20 minutos cada una, un total de 80 minutos, casi del tirón, para los de Guadalajara, que disputaban los dos primeros partidos seguidos.
El primer turno se enfrentaba al coco del torneo, el Rebi BM Cuenca de Lidio Jiménez que salía a pista con ganas de competir a un buen nivel.
Ricardo Mateo optaba por un siete inicial que contaba con David Vladi? en portería, extremos para Martín Ganuza y Fabio Chiuffa, en laterales Haitz Gorostidi y Manu Catalina y, en el centro, doble pivote, con Marcos Dorado y Diego Vera.
En un partido rápido, muy igualado desde el inicio, Martin Ganuza hacía mucho daño desde el extremo a la portería conquense con gran efectividad y, aunque Cuenca conseguía adelantarse ligeramente en la mitad de esta breve primera parte, a pesar del buen trabajo de Vladi? bajo palos, que conseguía llegar a detener un penalti, los de Guadalajara no perdían el ritmo y se recomponían para lograr de nuevo el empate 9-9 en el 15:00, con gol de penalti de Chiuffa.
Finalmente, tras una tarjeta roja para Enrico Aldini en Cuenca, por una dura acción sobre Diego Vera, el REBI BM Cuenca pegaba un arreón para llegar al descanso en el 20:00 con un 13-11, a pesar de ofrecer muy buenas sensaciones el conjunto alcarreño,
En los segundos veinte minutos era Jorge Blanco quien ocupaba la portería alcarreña. Y el partido seguía por los mismos derroteros, Cuenca por delante y Guadalajara sin bajar los brazos, con un Ganuza que estaba sembrado y Marcos Dorado castigando desde los seis metros, pero aún alejado del rival, 18-15 a diez minutos del final.
En estos minutos, los de Ricardo Mateo intentaban dar un plus, primero tirando de Haitz Gorostidi, que cogía las riendas del equipo para conseguir ponerse a dos, 18-16 a escasos ocho minutos de acabar este partido y, tras un tiempo muerto de Lidio Jiménez, con la salida de Nico García a pista en la portería.
Las instrucciones del técnico conquense surtían el efcto esperado y, de nuevo, era el REBI BM Cuenca quien volvía a abrir brecha y mandar en la pista, 22-18 a cinco minutos del final, aprovechando la veteranía de Fede Pizarro, que agarraba balones sueltos para marcar un gol tras otro.
Pero una vez más, los alcarreños demostraban su espíritu de lucha hasta el último momento, recortando, con la inestimable colaboración de Nico García, hasta el 23-21 a un minuto del final, al que se llegaba con un resultado de 24-22 y un Sanicentro BM Guadalajara que se preparaba para su siguiente partido frente a BM Caserío Ciudad Real.