Carlos Alcaraz ya está en las semifinales del US Open. De nuevo, tras superar su prueba de cuartos sin ceder un solo set. Ni uno en todo el torneo, algo que no había hecho hasta día de hoy. Rompiendo récords y rompiendo registros, en busca de coronarse nuevamente en Nueva York y regresar así al número uno mundial.

Un número uno que va a recuperar si consigue mejorar el torneo de Sinner, que todo apunta a una nueva final entre ellos. Preguntado por si la posibilidad de regresar a lo más alto es algo que le ronda en la cabeza, el murciano asumió que es inevitable que no sea así, aunque sabe que no debe pensar demasiado en ello.

«Es difícil no pensar en el número uno, es lógico, pero al salir a pista trato de no pensar en ello. Si pienso mucho en eso me pongo presión, y no quiero hacerlo. Trato de salir a pista, hacer lo mío, cumplir con mis objetivos en pista y disfrutar» aseguró al respecto.

Más allá de la posibilidad de regresar al uno, el tenista de El Palmar no escondió la felicidad por seguir mostrando un nivel excelso en sus partidos. «Estamos madurando y sabiendo gestionar todo, sobre todo fuera de la pista, donde hay muchas cosas alrededor. Hemos sabido lidiar con todo eso y mostrar nuestro mejor tenis a pesar de lo que hay fuera. Estar calmado fuera de pista es lo que me ayuda para sacar mi mejor nivel» explicó Carlitos.

EL GOLF COMO AYUDA

Al igual que ya sucedió en Wimbledon, el golf es uno de los temas a preguntar después de cada partido de Carlitos en la Artur Ashe, también porque ha decidido celebrar sus triunfos con el gesto del swing. En el partido ante Lehecka, un espectador de lujo relacionado con el golf estuvo vibrando con él, sin saber que acabaría siendo protagonista después.

«Al 100% iré mañana a jugar al golf, es algo que me está funcionando bien, por qué iba a cambiar la rutina. En cada día libre voy a jugar al golf. Mañana tengo una vuelta muy difícil con Juanki, Sergio García y David Puig. Será muy difícil, seguro. Mañana veremos los golpes que me da Sergio de ventaja, si me da 10 o 15 estará bien, no soy tan bueno, Sergio» explicó ante las risas del propio Sergio García, enfocado por las cámaras.

Sin duda, sea el golf o sea lo que sea, el nivel de Alcaraz es de diez día tras día y sus argumentos por volver a reinar en el US Open son cada vez más fuertes. «El hecho de jugar como vengo jugando, sin ceder ningún set, el nivel de concentración, da tranquilidad. Aunque me rompan el saque, estando con tranquilidad las cosas van a ir mejor. Que no me rompan el saque ayuda a jugar más tranquilo al resto y a ser más agresivo, que hoy lo he sido» finalizó hablando sobre su saque, una arma infranqueable en este torneo.