¿Un libro en la memoria?

‘El sueño de una noche de verano’, de William Shakespeare. Mi madre me lo leía interpretando los diálogos y divirtiéndonos juntas. De niña me llevaba a la biblioteca del barrio, en Río de Janeiro. Y recuerdo elDiario’ de Ana Frank, tenía 13 años, la misma edad que ella cuando lo escribió. Lo leí varias veces y hasta ese momento no sabía que un libro te podía tocar, e incluso cambiar tanto.

¿Ha evolucionado con la lectura?

Sí, al principio leía para descubrirme y ampliar mi mundo. Luego tuve una idea más romántica y filosófica, buscaba profundidad tanto de pensamientos como de sentimientos. Cuando entré en el mundo laboral empecé una fase de lecturas más técnicas y fui más práctica.

¿Mezcla ficción?

Ficción o poesía, especialmente en vacaciones. Después de mi divorcio busqué lecturas espirituales y de autoayuda, y ahora que estoy embarazada voy en modo monotema. Me gustaría que mis lecturas volvieran a ser menos prácticas en esta fase de mi vida.

¿Algún autor especial en sus estanterías?

Haruki Murakami y su ‘1Q84’, pero he leído casi todos sus libros. El primero que leí fue ‘Tokyo Blues’ y se volvió una obsesión. Me gustan sus historias con vidas paralelas que se entrecruzan, los elementos que se repiten en sus libros, gatos, jazz… Cuando terminas de leer pasas un tiempo extrañando a sus personajes.

¿Un título en el que encontró profundidad?

‘La insoportable levedad del ser’, de Milan Kundera. No lo leí para descubrirme a mí misma, pero fue lo que pasó. Se volvió una obsesión y lo leí varias veces. Mezcla contenido político, filosófico, psicológico, crea personajes inolvidables en los que te puedes ver reflejada y además es muy sexy, no sé si él pero su escritura sí; cómo separarlo, ¿verdad?

¿Un libro de crecimiento personal?

‘Desbordados’, de Robert Kegan. Leerlo fue como encontrar el Santo Grial. Profesor de Harvard y experto en desarrollo humano, conecta pedagogía, psicología, antropología, biología, y formula una teoría muy robusta sobre el desarrollo adulto y sus varias fases.