Madrid
Los organizadores de los festivales «Mad Cool» se sentaran en el banquillo como presuntos responsables de un delito contra el medio ambiente tras concluir la investigación el juzgado de instrucción número 34 de Plaza de Castilla sobre los altos niveles de ruido que se han registrado en los conciertos.
La Fiscalía solicita 2 años de prisión para el administrador único de esta mercantil y alrededor de 70.000 euros de multa por este presunto delito contra el medio ambiente. La acusación particular que ejerce la plataforma vecinal Stop Mad Cool Villaverde se solicitan 3 años de privación de libertad junto a otros 10.000 euros en concepto de indemnización por los problemas causados. Se solicita también prohibir en el futuro cualquier actividad de este tipo en el recinto del distrito de Villaverde, muy cerca de la localidad de Getafe
Es la resolución definitiva dictada por el juzgado de Instrucción número 34 de Madrid tras la investigación que activó en su día el Ministerio Público. Serán los juzgados de Lo Penal de Madrid los que enjuicien este asunto al tratarse de un delito con penas que no superan los 2 años.