Había ganas de ver al nuevo Aula de Salva Puig con una plantilla tan renovada, mucho más después de la primera victoria en Arrecife; … sin embargo, habrá que esperar al próximo partido en Huerta del Rey, ya que su presentación debe suponer un borrón y cuenta después de la derrota amplia y dolorosa contra el Beti-Onak.

El equipo hizo aguas en todas las facetas del juego y en todas las parcelas del juego, ni siquiera llegó a entrar en el partido, con un 0-2 en contra de salida que no fue capaz de equilibrar en ningún momento. Si este Aula no tiene kilos para levantar barreras en defensa, tampoco tuvo velocidad para corregir posiciones y taponar las vías de entrada que encontraba sin problemas el equipo navarro, muy cómodo para llegar a los seis metros y ensanchar las diferencias.

Con 3-7 en contra se abrió un hilo de esperanza. Carratú realizó la primera parada y la posición adelantada de Jallow ralentizó los ataques de Beti-Onak, que demostró oficio y paciencia para no perder los papeles, administró sus posesiones hasta llegar al límite del pasivo y encontró ventajas para responder a un parcial de 3-0 en contra con otro a favor de 0-4 que le devolvió la tranquilidad del 7-12 y obligó a Puig a pedir un tiempo muerto.

El Aula no arrancaba porque estaba tímido, sin que nadie diera un paso adelante; en la portería contraria, Patricia Encinas se hinchó a parar sin grandes aspavientos, como si espantara moscas; comenzó con dos penaltis y continuó con bloqueos en los lanzamientos que llegaban desde las esquinas, lo que rompió todavía más la confianza del Aula. El 12-19 era un tanteo difícil de remontar en la segunda parte.

Aula Valladolid

Carratú (p), Lucio (2), Jallow (1), Monteagudo (2), Bergara (2), Baquedano (3), González de Garibay (4) -siete inicial-; Sanz (p), Patiño, Gutiérrez-Paris, Zürni (2), Lovera (1), Gorbatsjova (3, 1p) y Guerra.

20

33

Beti-Onak

Encinas (p, 2), Zamora (4), Sans (4), Casasola (2), Gutiérrez (4), García (5), Fernández-Agustí (3) -siete inicial-; Luzuriaga (p), Aileen Ripa (3), Ventura, Gil, Zalgizuri (3), Tardío, Arranz (1) y Canas (2, 1p).

  • Parciales cada cinco minutos
    : 2-4, 5-7, 7-11, 9-13, 9-14, 12-19 (descanso); 13-22, 17-23, 17-27, 18-29, 19-32 y 20-33

  • Árbitros
    Santos López y Andreeva. Exclusiones a Baquedano (min. 15), González de Garibay (min. 30), Lovera (min. 44), Bergara (min. 52); Casasola (min. 6), Aileen Ripa (min. 24), García (min. 29) y Ventura (min. 47).

  • Incidencias
    Huerta del Rey. Jornada 2ª de la Liga Guerreras. Floja entrada.

El guion no varió, con un Aula sin signos de rebeldía, y con un Beti-Onak paciente que se sabía superior, como si recordara a su paisano Miguel Indurain para convencer a sus rivales que la cuesta arriba terminaría por lanzarlos a la cuneta. Estuvo a punto de alcanzar esa distancia psicológica de los diez goles, pero Nerea Canas no acertó con el gol, el marcador se atascó en el 13-22, y la grada del Huerta del Rey despertó porque vio ahí una ventana abierta a la reacción. Sí se produjo con un par de fogonazos de Baquedano, pero fue algo efímero que se quedó en salvas de fogueo; el 17-23 fue la distancia más corta entre Aula y Beti-Onak, hasta que Micaela Casasola y Graciela García tomaron las riendas y recuperaron la iniciativa en el juego y en el marcador hasta alcanzar, ya sí, la frontera de los diez goles (17-27).

El Aula bajó los brazos, perdió balones imposibles por manos blandas, se estrelló contra los palos cuando superó los brazos navarros, y engordó las estadísticas de Encinas, que redondeó su tarde con dos goles ante la portería abierta de par en par en el área de enfrente. Tampoco pudieron las de Puig encontrar un par de minutos con un juego más asentado porque la pareja arbitral se mostró muy rigurosa y castigó a las pucelanas con más exclusiones de las que demandó la limpieza del partido.

Sin interés

El desenlace no tenía más interés que alcanzar el minuto 60, sin ánimo las vallisoletanas ni de maquillar un resultado que empezaba a resultar escandaloso, y eso que el Beti-Onak tampoco quiso ensangrentar la cara de sus rivales y aprovechó esa fase para mover el banquillo y dar minutos a las jugadoras reservas.

Solo una contra de González de Garibay rompió la monotonía del final, en el segundo momento en que el Aula logró correr de cancha a cancha después de robar un balón; la anterior fue de Inoa Lucio cuando todavía había margen de mejora, la siguiente solo sirvió para que el Aula llegara a los veinte goles. Habrá que esperar a otras tardes para medir el potencial real de esta plantilla.