Giorgio Armani, fallecido a los 91 años de edad, era mucho más que un diseñador de moda. A lo largo de vida, jamás se desvinculó de su negocio, amparado todo bajo el paraguas de Armani Group, fundado ahora hace medio siglo. Es más, nunca … cedió el control del mismo, permaneciendo como CEO y único accionista, algo único ya habitual en un sector dominado, como tantos otros, por conglomerados empresariales que tienen el control de distintos sellos. No así el de la casa fundada en 1975 por el diseñador nacido en Piacenza, que ha sustentado su legado en la diversificación empresarial exitosa. Tanto, que deja una de las grandes fortunas de Italia como herencia. Negocios y lujo, así ha sido la vida de Giorgio Armani.

Armani Group es el legado profesional del ya añorado diseñador italiano. Un proyecto personal lanzado como casa de moda junto a su pareja en los años 70, Sergio Galeotti, que cinco décadas después abarca casi todas las disciplinas que el diseño artístico inunda. Desde hoteles a restauración, pasando por la decoración de interiores en yates o colaboraciones especiales con el sector de la automoción. Condensar en unas líneas todo lo que Giorgio Armani abarcó es casi imposible; no en vano, su figura es todo un «símbolo de la mejor Italia», como ha dicho tras el fallecimiento del diseñador la primera ministra del país transalpino, Giorgia Meloni.

Giorgio Armani al término de uno de sus desfiles en 2024

Giorgio Armani al término de uno de sus desfiles en 2024

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Control y diversificación: los negocios de Giorgio Armani

El rey del traje de hombre fue un empresario muy vinculado a sus negocios. CEO y único accionista de la compañía (Giorgio Armani Spa) que fundó hace medio siglo, no se separó hasta el día de su muerte.

Pero más allá del control personal que ejercía sobre sus negocios, si hay una palabra que describa la carrera profesional de Giorgio Armani, es diversificación. Diversificación en la moda, por un lado, y en sus actividades empresariales por otro.

Dentro del universo de la moda, en el que se formó y creció profesionalmente Armani —aunque cursó tres años de la carrera de Medicina—, la marca ha evolucionado de forma notable desde aquella primera colección masculina para la primavera verano de 1976. Desde entonces, Armani ha hizo desarrollando proyectos textiles para nichos específicos.

En 1981 vio la luz Emporio Armani, la que se puede considerar como la primera línea de moda de precios accesibles jamás lanzada por un diseñador del prestigio de Giorgio Armani. Diez años después, el diseñador italiano redobló su apuesta por la moda más accesible y enfocada en el público joven con el lanzamiento de Armani Exchange (A|X), un proyecto antagónico a Armani Privé, su sello de alta costura.

Ya en el siglo XXI, Armani dio un nuevo paso adelante en su afán por la diversificación y la especialización en la moda con la creación de EA7, su línea más deportiva, con la que ha patrocinado y patrocina a equipos y atletas de distintas disciplinas. Es muy conocida su relación con el equipo de baloncesto Olimpia Milano, ciudad en la que está la sede principal de Armani Group, pero también es la marca que viste al Napoli, actual campeón de la Serie A de fútbol.

Además, EA7 viste a tenistas como Fabio Fognini, la raqueta italiana más carismática y brillante de los últimos años hasta la aparición de Jannick Sinner. Y a través de esta línea, Giorgio Armani también ha mantenido una gran vinculación con el deporte olímpico: sin ir más lejos, firmó todos los uniformes deportivos del equipo italiano en los Juegos Olímpicos de París 2024.

Parte de la delegación italiana en los Juegos Olímpicos de 2024 con vestuario de Armani

Parte de la delegación italiana en los Juegos Olímpicos de 2024 con vestuario de Armani

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Toda esta evolución de la marca Armani en el sector de la moda se ha producido de forma simultánea a la carrera brillante de su fundador como diseñador de vestuarios para películas de Hollywood. Y es que Giorgio Armani participó en más de 200 rodajes, con títulos tan importantes como American Gigolo, Los intocables, Uno de los nuestros, Batman o El lobo de Wall Street.

No es de extrañar que, teniendo en cuenta además el amor por el cine que siempre profesó en público Giorgio Armani —Cary Grant fue su primera inspiración—, sea larguísima la lista de estrellas del séptimo arte que han lucido diseños de Armani en las alfombras rojas más prestigiosas del mundo: entre otros, Leonardo DiCaprio, Julia Roberts, Cate Blanchett o Diane Keaton.

David Beckham junto a Giorgio Armani

David Beckham junto a Giorgio Armani

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La diversificación no solo ha sido seña de identidad de los negocios de Giorgio Armani en lo que respecta a la moda. El diseñador transalpino no dudó en ampliar horizontes a otras disciplinas comerciales donde el diseño tiene un papel decisivo.

De esta forma, Armani Group, que da trabajo a más de 10.000 trabajadores en la actualidad e ingresó 2.300 millones de euros en 2024, también cuenta, por ejemplo, con Armani Casa, un sello fundado en el año 2000 especializado en decoración del hogar. Muebles, lámparas y accesorios para el hogar componen sus colecciones, que han servido también para decorar uno de los lujos personales en la vida de Giorgio Armani, sus residencias privadas en París, Milán, Saint Moritz o Saint-Tropez. Armani Casa es también la marca con la que Giorgio Armani ha diseñado varios interiores de yates de lujo del astillero Admiral —el último será presentado a finales de septiembre en el salón internacional de Mónaco—;

Además, Armani Group cuenta con compañías especializadas en hoteles (Armani Hotels), restaurantes (Armani Ristorante), productos de belleza (Armani Beauty) y hasta con una floristería (Armani/Fiori).

La colección de Armani Hotels & Resorts cuenta con un establecimiento en Milán y otro en Dubai, mientras que la marca de restauración fue creada en 1998 con la apertura del restaurante Armani en París y 27 años después cuenta con más de establecimientos —restaurantes y cafés— en lugares como Milán, Tokio o Dubai. La última adquisición, cerrada apenas unos meses antes del fallecimiento de Giorgio Armani, había sido muy especial para el diseñador, que compró la Capannina di Franceschi, un icónico establecimiento de playa fundado en 1929 en la localidad italiana de Forte dei Marmi en el que durante muchos años se refugió y disfrutó el propio Armani.

Giorgio Armani en uno de sus restaurantes

Giorgio Armani en uno de sus restaurantes

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Diseño de yates de lujo, coches y motos

A toda la actividad empresarial de Giorgio Armani citada hay que sumar otra faceta artística del transalpino muy de su gusto: el diseño de interiores de yates de lujo y de ediciones especiales de coches y motos.

Ya hemos citado la colaboración en los últimos años de Armani con el astillero Admiral, en el que invirtió económicamente. Pero a lo largo de su vida, el creador italiano también desarrolló algunas colaboraciones especiales con firmas como Bugatti, Mercedes, Vespa o Fiat.

Con la casa alemana de coches, Giorgio Armani colaboró en el diseño de una serie especial del CLK limitada a solo 100 unidades inspirada en el rodaje de American Gigolo, cinta en la que Richard Gere conducía uno de estos coches.

Con Vespa, Armani se atrevió a diseñar una edición especial del modelo 956 en el año 2015, coincidiendo con el 40 aniversario de su marca y el 130 cumpleaños de Piaggio, grupo madre de Vespa. Un año después, Armani colaboró con Bugatti en el diseño de una colección cápsula de moda masculina y complementos coincidiendo con el lanzamiento del Bugatti Chiron. y finalmente, este mismo año, a comienzos de 2025, se entregaron las primeras unidades del Fiat 500e Giorgio Armani Collector’s Edition, una edición especial del icónico coche de la marca italiana que seguramente se convertirá en un objeto de deseo en el mercado de segunda mano a corto plazo.

Giorgio Armani posa con uno de los coches 500e Giorgio Armani Collector's Edition de Fiat

Giorgio Armani posa con uno de los coches 500e Giorgio Armani Collector’s Edition de Fiat

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Lujos en la vida de Giorgio Armani

Con un bagaje empresarial y artístico tan extenso y exitoso, no sorprende que Bloomberg sitúe a Giorgio Armani como la sexta fortuna más grande de Italia: 8.000 millones de euros, cifra que Forbes eleva si cabe un poco más, alrededor de los 11.500 millones de euros.

Lógicamente, esta fortuna económica ha facilitado a Giorgio Armani acumular en vida algunos lujos inaccesibles para la mayoría de los bolsillos del planeta. No es un caso el suyo como el de Ralph Lauren, cuya gran afición son los coches: el diseñador italiano tenía especial predilección por las casas y los yates.

Precisamente del Main, el yate de Giorgio Armani valorado en unos 60 millones de euros, te hablamos largo y tendido en Summum cuando empezó a surcar los mares preferidos del diseñador: los del Mediterráneo. Y también te mostramos en un reportaje fotográfico posterior los detalles de esta embarcación de 72 metros de eslora y capacidad para 14 personas que empezó a construirse en el año 2021 y cuyo interior fue diseñado con exquisitos acabados, como no podía ser de otro modo teniendo en cuenta el nombre del propietario.

En cambio, no te habíamos hablado ni mostrado hasta la fecha las casas de Giorgio Armani, que son impresionantes. Auténticos obras de arte arquitectónicas.

Que se sepa, porque la propia compañía las ha mostrado en sus perfiles de redes sociales y porque el propio Giorgio Armani se ha referido a ellas en numerosas ocasiones, el diseñador tenía casas en Saint-Tropez, Broni (Lombardía), Pantelaria (Sicilia), Forte dei Marmi y Milán.

La residencia de Saint-Tropez la adquirió Giorgio Armani en 1996 y destaca sobre todo por la naturaleza que rodea la vivienda, con un enorme jardín de cipreses, jazmines y eucaliptos. Giorgio Armani reformó la casa con piezas vintage y muebles de las colecciones de Armani Casa.

No menos elegante es la residencia de Giorgio Armani en Lombardía. Localizada en Broni, se trata de una vivienda de los años 50 restaurada por el diseñador tras adquirirla en los años 80. «Es una especie de sueño, un teatro en el que a veces me sumerjo durante unos días, experimentando una atmósfera completamente diferente a la que estoy acostumbrado», decía de esta casa, en cuyo jardín pastan animales como las alpacas, el propio Armani.

La primera residencia vacacional de Giorgio Armani está ubicada en Forte dei Marmi, donde el diseñador dejó una parte de su corazón, de ahí que adquiriera recientemente el local de playa Capannina di Franceschi, como te hemos contado anteriormente.

Armani decoró esta villa con inspiración marítima y solo ha modificado ligeramente la decoración y estancias con el paso de los años, añadiendo una zona de spa y gimnasio y algunos elementos decorativos puntuales. La estética retro se mantiene intacta en la vivienda.

También en Italia, en la isla de Pantelaria, Giorgio Armani adquirió tres dammusi, construcciones locales a base de piedra volcánica, agua, tierra y con un tejado abovedado blanco que convirtió en una única vivienda en la que dedicó tiempo e inversión al jardín, decorado con especies como el tiar mahorí o el jazmín, entre otros. La vivienda tiene un emplazamiento único junto al mar.

Todavía hay más. El legado inmobiliario de Giorgio Armani es apabullante. Así lo demuestra su casa de Milán, donde ha variado su residencia en múltiples ocasiones como él propio diseñador reconoció en vida, hasta que se estableció en un edificio del siglo XVII en la via Borgonuovo.

Y también su residencia en St. Moritz, una impresionante vivienda del siglo XVII con granero anexo que Giorgio Armani transformó completamente inspirándose en una de sus grandes pasiones artísticas: el estilo oriental. El resultado es una casa de lujo que recuerda a los ryokanes japoneses, con la madera oscura como gran protagonista en su interior.

El tiempo dirá qué ocurre con el legado de Giorgio Armani en forma de piezas artísticas de moda, belleza, interiores de locales y yates y también con todas sus casas. De momento, a corto plazo, Italia celebrará el legado de Armani con una muestra en la Pinacoteca di Brera (Milán), Celebrating 50 Years of Giorgio Armani,. Será la primera exposición de moda en la historia del museo, que enseñará a sus visitantes 150 piezas de archivo, y se estrenará coincidiendo con la celebración de la Semana de la Moda de Milán a finales de septiembre, evento, el primero sin Giorgio Armani, que su marca cerrará con un desfile en el patio de honor del Palazzo Brera.