Fue una puesta de largo por todo lo alto. Nadie quiso perderse el estreno del nuevo Roig Arena y la sociedad valenciana se volcó … en la convocatoria. Al empresario Juan Roig lo paraban las señoras en las zonas donde se distribuyen los puestos de comida: «Senyor Roig, enhorabona» y se acercaban a darle un abrazo como si fuese una de las estrellas que iba a actuar sobre el escenario en pocos minutos. Imagino la emoción del presidente de Mercadona al ver su sueño cumplido, un auditorio deslumbrante, lleno hasta colgar el no hay entradas hace semanas y un público de todas las edades aplaudiendo desde la primera canción y con un nudo en la garganta al escuchar ‘Noelia’, ‘Libre’, ‘Mi tierra’ o cualquiera de esos temas que roto la barrera del tiempo.

Juan Roig estuvo en la zona más vip del auditorio con su familia, su mujer Hortensia Herrero, sus hijas Carolina, Hortensia, Juana y Amparo, su hermano Fernando Roig y un grupo de buenos amigos, entre ellos Ana Peris y Emilio Morera, Esther Martinavarro y Joaquín Ballester, Carlos Virosque y Patricia Casañ, Marta Monterde y Miguel Cases, Antonio Meco y Mª José Albert, Marta Querol, Clara Playa y su hija Clara Raga, empresarios como Araceli Císcar, Adolfo Utor, Enrique Riquelme, Agnès Noguera o Héctor Dominguis y de la familia Segura, buenos amigos de la familia Roig, el abogado David González y Laura Segura y Francisco Segura y Sofía Mora.

Algunos empresarios vieron el concierto desde su propio palco. Fue el caso del castellonense Federico Michavila o el naviero Vicente Boluda y Esther Pastor, que invitaron a su palco a directivos de la COPE como Sergio Peláez, Vicente Ordaz y Borja Rodríguez. Además compartieron el concierto con los empresarios Paco Lorente y Loreto Cerdá y Vicente Ruiz y Ali Torres.

La delegada del Gobierno en la Comunitat, Pilar Bernabé, durante el estreno del Roig Arena.

La delegada del Gobierno en la Comunitat, Pilar Bernabé, durante el estreno del Roig Arena.

I. Marsilla

El paco de Boluda está muy cerca de otros palcos alquilados por grandes empresas, como el de Iberdrola o el de CaixaBank, en el que estuvo anoche la directora territorial de la entidad Olga García, Beatriz Albentosa y César Rafael Miguel Sanz.


Los palcos vip tienen algunos servicios especiales, como plaza de aparcamiento, catering de Miguel Martí -el Telar-, con menús que varían en cada concierto y bebidas de mucha calidad, tanto vinos como champán y licores.

El concierto se disfrutó igual tanto desde las zonas vip como en las gradas, donde los asientos son cómodos y espaciosos y tienen mucha visibilidad. En pista estuvo la vicepresidenta del Cosell Susana Camarero, el vicepresidente Francisco José Gan Pampols, los conselleres Juan Carlos Valderrama, Vicente Martínez Mus, la consellera Marian Cano y el Síndic José María Llanos.

También estuvo la delegada de Gobierno, Pilar Bernarbé y el subdelegado José Rodríguez; la alcaldesa de Valencia, María José Catalá -a la que enfocó la cámara en una ocasión- y varios concejales, entre ellos Juan Carlos Caballero, Paula Llobet y José Luis Moreno, José Marí Olano y Amalia De Gregorio y también el presidente de la Cámara de Comercio, José Vicente Morata, y Pilar Pons, el empresario Francisco Corell y Salomé Quiles, Vicente Folgado y Rosa Morera, Javier Vallés, la periodista Ángela Pla y Juan Lagardera, el cocinero Ricard Camarena y Mari Carmen Bañuls. El empresario Juan Carlos Gómez Pantoja y Sonia Bas compartieron palco con Luis Lluch y Tetiana Turanova.

Faltaron algunas amigas de Hortensia Herrero, como Mayrén Beneyto, que todavía está de medio luto por el fallecimiento de su hermano, o el secretario de AVE, Diego Lorente, de boda en Artíes.

Quién estuvo desde primera hora de la tarde fue el matrimonio de arquitectos José Martí y Mª Angeles Ros, socios junto a Amparo Roig de ERRE Arquitectos, el estudio que ha diseñado y proyectado el auditorio. «¡Cómo no íbamos a estar!», dijo Martí. Lo mismo que pensaron los cerca de veinte mil asistentes que llenaron en nuevo Roig Arena.