La compañía de inteligencia artificial Anthropic llegó a un acuerdo de 1.500 millones de dólares con un grupo de autores que habían presentado una demanda colectiva en su contra. La acusación sostenía que la empresa utilizó copias pirateadas de libros para entrenar su modelo de inteligencia artificial “Claude”.
Según lo estipulado en la propuesta, que deberá ser revisada y aprobada por un tribunal, se contempla una compensación de aproximadamente 3.000 dólares por autor, abarcando alrededor de 500.000 obras literarias. De concretarse, el acuerdo representaría la mayor compensación pública por derechos de autor registrada hasta ahora.
El Gremio de Autores, una organización que agrupa a miles de escritores, manifestó su satisfacción con la resolución. Su directora ejecutiva destacó que este resultado beneficia a autores, editoriales y demás titulares de derechos.
La demanda había sido presentada inicialmente en 2023 por la escritora Andrea Bartz, junto con los autores Charles Graeber y Kirk Wallace Johnson. Posteriormente, el grupo legal se amplió para incluir a un número mayor de afectados, después de que Anthropic fuera señalada de haber descargado millones de libros desde sitios de piratería digital como Books3, Library Genesis y Pirate Library Mirror.
En junio, el juez federal determinó que el uso de obras con derechos de autor en el entrenamiento de modelos de IA no constituía por sí mismo una infracción. No obstante, subrayó que Anthropic había obtenido más de siete millones de textos de manera ilícita a través de plataformas no autorizadas.
De haberse realizado el juicio programado para diciembre y de haber perdido la compañía, analistas consideraban que la sanción económica habría sido considerable. Así, la exposición financiera rondaba miles de millones de dólares, con el potencial de afectar seriamente la continuidad de la firma.
El contexto de este acuerdo coincide con un aumento de la vigilancia sobre las prácticas de las empresas tecnológicas. El mes anterior, X Corp y X.AI entablaron una demanda antimonopolio contra Apple y OpenAI, alegando comportamientos que calificaron de monopolísticos en el mercado de teléfonos inteligentes y chatbots de IA generativa. En paralelo, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, abrió una investigación contra Meta y Character.ai, enfocada en determinar si sus plataformas de IA habían inducido a error a menores con mensajes vinculados a apoyo terapéutico, lo que plantea cuestionamientos en torno a la privacidad y el uso de datos personales.