El 71% de las personas que padecen migraña desearían poder realizar actividades cotidianas sin dolor ni limitaciones (trabajar, estudiar, salir con amigos, hacer deporte, descansar, tener energía…), según se desprende de una encuesta elaborada por la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE). 

Por ello, la Asociación pone en marcha la campaña ‘Deseos Extraordinarios’, coincidiendo con el Día Internacional de Acción contra la Migraña, que se celebra este viernes día 12 de septiembre, cuya información estará disponible en la web: www.dolordecabeza.net/deseosextraordinarios.

Se calcula que en España hay cinco millones de personas afectadas por esta enfermedad neurológica, siendo la inmensa mayoría mujeres (ocho de cada 10 casos). Se caracteriza por episodios de dolor que pueden durar hasta tres días y que suelen ir acompañados de otros síntomas como, por ejemplo, hipersensibilidad a la luz, al ruido, a los olores, náuseas o aura, entre otros muchos. Casi 1,5 millones de personas con migraña sufren más de 15 días de migraña al mes (lo que se conoce como migraña crónica).

La enfermedad, como enfatiza Isabel Colomina, presidenta de AEMICE, no es sólo un dolor de cabeza. Es una enfermedad neurológica que impacta en cada rincón de la vida. Así lo han reflejado los resultados obtenidos en la encuesta realizada a 888 personas con migraña en el marco de la campaña ‘Deseos Extraordinarios’ de AEMICE; con el fin de conocer qué pedirían estos pacientes como deseo extraordinario, excluyendo el deseo de ‘no tener migraña’.

Qué querrían hacer

El 71 % (627 personas) de los encuestados formularon como deseo extraordinario poder realizar actividades cotidianas sin dolor ni limitaciones; mientras que solo el 10 % (93 personas) pidieron deseos más genéricos o sociales, como ganar la lotería, comprar una casa o salud para toda la familia. Así, las personas que viven con migraña han compartido su deseo de poder jugar con sus hijos en el parque «sin tener que volverme a casa por el dolor», ir al cine como antes «sin miedo a que el ruido o las luces me provoquen una crisis» o «poder ir al trabajo sin tener que elegir entre forzarme o dar explicaciones que nadie entiende.» Los resultados, como subraya Colomina, «evidencian cómo actividades cotidianas que para la mayoría de la población son normales, para quienes conviven con migraña se convierten en un deseo extraordinario».

El objetivo de la campaña, como explica la presidenta de la Asociación, es triple. Por un lado, se busca concienciar a la sociedad sobre el impacto real de la migraña más allá del dolor físico, poniendo el foco en las limitaciones invisibles que impone y en cómo condiciona decisiones, momentos y relaciones. El otro gran foco es romper el estigma que aún rodea a la migraña, mostrando que no se trata de una simple molestia pasajera, sino de una enfermedad neurológica con un alto impacto en la calidad de vida.

Finalmente, como manifiesta Colomina, se quiere invitar a la comprensión: «Mostrar que la banalización en muchas ocasiones surge del desconocimiento, y que solo con información y empatía podremos construir una sociedad que acompañe, escuche y respete a quienes la sufren».