España debutó en la Copa Davis en 1921. Ha jugado 89 temporadas la máxima competición por países y ha disputado 226 eliminatorias. Contra Dinamarca es la que hace 227. En la historia de la competición que empezó en 1900 ha habido 66 remontadas con un 0-2 en el marcador.
La selección nacional no está entre las que lo consiguieron. De hecho, para encontrar la última, había que remontarse a la victoria de Dinamarca sobre Serbia en el Royal Arena de Copenhague.
El cuadro escandinavo vuelve a ser protagonista, esta vez a domicilio, sobre la tierra batida de la pista Manolo Santana de Puente Romano. Después de la primera jornada, domina al anfitrión por dos victorias a cero y este domingo tendrá tres oportunidades para sellar su pase a la Final a 8 de Bolonia. Nunca llegó tan lejos.
Moeller pega de derecha.Jorge Zapata
Al triunfo inicial de Holger Rune sobre Pablo Carreño se le ha unido el de Elmer Moeller frente a Jaume Munar, por 2-6, 6-1 y 6-4. Moeller, de la misma generación de Rune y de Carlos Alcaraz (ganó al murciano con 12 años), había sumado ya el punto decisivo en la serie contra los serbios. Fue verdugo de Hamad Medjedovic.
«Me considero un jugador de Copa Davis«, decía en su entrevista con MARCA. Lo ha demostrado este sábado. Elmer logró darle la vuelta a un set adverso.
El guión recordó al día de Medjedovic. La diferencia de ranking (113 a 37) no se vio sobre la arena. El danés mandó casi siempre desde la línea blanca con certeros golpes ganadores. Uno de revés le dio un triunfo que deja a España sin red.
Para encontrar la última vez que España claudicó en casa y en polvo de ladrillo hay que trasladarse al abril de 1999 con el traspié ante el Brasil de Gustavo Kuerten.