La etapa final de la Vuelta Ciclista a España en Madrid se ha visto marcada por varios incidentes que han obligado a la intervención de los antidisturbios, a un cambio de recorrido de última hora e incluso a la cancelación de la tradicional ceremonia del podio.

Durante la jornada, se pudo ver a la presidenta de la Comunidad de Madrid (CAM) en el coche del director de la vuelta y saludando al equipo de Israel. Además, la misma también defendió que el deporte no debía convertirse en un instrumento de división y que un presidente debía «llamar a la convivencia y al entendimiento».

Sin embargo, el desarrollo de la etapa evidenció la dificultad de controlar la situación: manifestantes propalestinos invadieron partes del recorrido, lanzaron vallas y botellas, y obligaron a la organización a modificar el trazado y, finalmente, cancelar la entrada al centro de Madrid. 

La imagen de Ayuso, que horas antes sonreía saludando al equipo israelí, contrastaba con el caos que cerró la Vuelta. El periodista y documentalista español Antonio Maestre, quien fue subdirector de la revista mensual La Marea, no tardó en reaccionar tras comprobar el desenlace del evento, comentando en redes sociales con ironía: «Ya no se está riendo tanto.» 

Cancelada la ceremonia de podio

La ceremonia de podio de la Vuelta Ciclista a España ha sido cancelada después de la suspensión de la última etapa tras las protestas propalestinas durante el recorrido previsto por el centro de Madrid. «La etapa 21 de La Vuelta finaliza por motivos de seguridad. No habrá ceremonia protocolaria de podio», ha afirmado la organización en la red social X (antes conocido como Twitter). 

De este modo, se pone punto y final a una 90 edición de la ronda española destacada por las protestas en apoyo del pueblo palestino y contra el «genocidio» en Gaza por la presencia del equipo Israel-Premier Tech.