Los últimos meses han traído muchas idas y venidas para una de las mayores leyendas de la historia reciente de la Fórmula 1, Lewis Hamilton. El siete veces campeón del mundo dejó atrás el pasado verano Mercedes para firmar por Ferrari con una apuesta muy clara por sí mismo y por la historia. Esto no le salió tan bien como podía esperarse, pues ni el coche de Maranello es tan top como el de 2024 ni él mismo se ha adaptado del todo bien. Por eso mismo se le vio muy tocado en las últimas carreras, al punto de que se llegó es especular con que su adiós estaba cerca, pero ahora las cosas parecen haber vuelto a la normalidad.

Lewis tocó fondo en una de sus pistas fetiche, la de Hungría. En Hungaroring poco más que pidió a Ferrari que le dejara marchar y buscara un nuevo piloto. Si en un lugar donde tantas veces ha dominado con solvencia ahora era una rémora de sí mismo, no veía sentido en continuar. Por eso mismo quería cortar por lo sano e incluso había voces que le aconsejaban no terminar ni siquiera este curso. Sin embargo la realidad era algo distinto, pero al menos este año estaba claro que tenía que acabarlo.

Estas carreras servirían como oportunidad para volver a sentirse un piloto competitivo, o por el contrario, para confirmar el final de una carrera de leyenda. Y al final parece que será lo primero. Lo solución fue la que necesitaba, una buena carrera. En Monza, templo ferrarista donde los haya, estuvo muy cerca de Charles Leclerc todo el fin de semana y en carrera, pese a salir 10º por una sanción, remontó ante un meritorio 6º puesto tras correr a las mil maravillas una alocada cita.

Una promesa para Fernando AlonsoUna promesa para Fernando AlonsoMax Verstappen apuesta por FerrariMax Verstappen apuesta por FerrariCarlos Sainz, condenado injustamenteCarlos Sainz, condenado injustamenteEl verdadero Hamilton

Más allá del resultado, que fue bueno vistas las circunstancias, la realidad es que se vio a un Hamilton distinto, cómodo. Tras tantos años dentro de un Mercedes asimilar el estilo de un Ferrari es complicado, pero parece que al fin lo tiene y va a poder rascar todo el potencial. Los expertos tienen claro que desde ahora hasta el final va a ir mejorando en cada vuelta que dé. E incluso los más escépticos y que en su momento le imploraban por la retirada, ahora están convencidos de que está muy cerca de demostrar el potencial real que posee y al que puede llevar a los de Manarello.