La estatua inaugurada en diciembre de 2024 a la leyenda canguesa del balonmano, Rodrigo Corrales, fue objeto ayer de un segundo acto de inauguración, para descubrirse la placa con la foto del portero y con su nombre, así como un texto que reconoce el «trabajo» y la «ilusión» como dos de los valores que llevaron a Corrales al éxito.

En el acto de ayer participó el propio deportista, así como la alcaldesa, Araceli Gestido (BNG) y el concejal de Deportes Eugenio González (PSOE).

La estatua se levanta ante el pabellón de O Gatañal. González explica que en su día la Escola de Cantería de Pontevedra realizó la obra, pero que la placa estaba pendiente y se retrasó varios meses por el cambio de esta escuela, que pasó de depender de la Diputación a hacerlo directamente de la Xunta de Galicia.

Rodrigo Corrales es una de las caras más reconocidas del deporte en O Morrazo y una leyenda de su disciplina en toda España. No en vano cuenta entre su vasto palmarés con dos medallas olímpicas de bronce, otros dos bronces del Campeonato Mundial de Balonmano y dos oros y una plata en otros tantos Campeonatos Europeos de Balonmano.