GREGORIO LEÓN
El presidente del Real Murcia quiere sacar al equipo de la carretera, evitar largos desplazamientos para que haga su trabajo diario de entrenamiento. El autobús de los futbolistas no deberá trabajar durante la semana para viajar a Pinatar Arena. Y Felipe Moreno calcula que en febrero o marzo tendrá ya disponibles cuatro campos de la nueva Ciudad Deportiva de la entidad grana, si se cumplen los planes y plazos previstos. Según la información que se maneja en las oficinas murcianistas, la aprobación del proyecto podría producirse esta misma semana, dando paso al siguiente trámite, el de exposición pública. Ese es el gran proyecto que ahora impulsa el Murcia, y el que consume parte de las energías de los dirigentes granas. Antes del partido que el Murcia jugará contra el Ibiza el club presentará las reformas a la que va a ser sometido el estadio Nueva Condomina-Enrique Roca, y que incrementarán su aforo.
Otra realidad la dicta la tabla clasificatoria, que de momento ofrece datos poco alentadores, con el equipo en mitad de tabla, a tres puntos del líder. Pero en la zona noble del estadio no se ha extendido ni el nerviosismo ni la inquietud. El optimismo de agosto no ha recibido ningún mordisco en septiembre. Son solo cuatro jornadas las que se han disputado, y ni siquiera hay elementos para sacar conclusiones provisionales sobre la plantilla diseñada y sus capacidades. Es innegable que el comienzo titubeante de los grana en Primera RFEF ha frenado el crecimiento disparado de los abonados, pero aun así el número ronda los 18.000, cifra casi insólita en el tercer escalón del fútbol español.
En las próximas horas se conocerá el alcance de la lesión de Antxon Jaso.