Donald Trump (AP Foto/Julia Demaree Nikhinson)
La Casa Blanca informó el lunes que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rechazó la invitación al diálogo remitida por el dictador venezolano Nicolás Maduro. El mensaje, según la portavoz Karoline Leavitt en rueda de prensa, fue calificado por el gobierno estadounidense como “plagado de mentiras”. Leavitt afirmó que la postura de la administración sobre el régimen de Venezuela se mantiene sin cambios y describió a Maduro como “ilegítimo”.
Leavitt añadió que Trump “ha demostrado claramente que está dispuesto a utilizar todos los medios necesarios para frenar el tráfico ilegal de drogas provenientes del régimen de Venezuela”. Los comentarios llegan tras el despliegue de una flotilla de ocho buques y una decena de cazas en el Caribe y Puerto Rico por parte de fuerzas estadounidenses, tras lo cual al menos tres lanchas sospechosas de portar drogas fueron destruidas con misiles en alta mar.
Washington justificó estas operaciones alegando riesgos para la seguridad nacional, mientras que el régimen de Maduro acusó a Estados Unidos de ejecutar ataques ilegales.
La carta de Maduro, dada a conocer el domingo aunque enviada poco después del primer ataque en el Caribe a principios de septiembre, instaba al mandatario estadounidense: “Lo invito Presidente a preservar la paz con diálogo y entendimiento en todo el hemisferio”.
Además, el gobierno de Trump anunció una recompensa de USD 50 millones por la captura de Maduro, al que responsabiliza de liderar un cártel internacional de drogas.
Fotografía de archivo fechada el 09 de enero de 2025 de la líder opositora María Corina Machado, hablando durante un acto de campaña en Caracas (Venezuela). EFE/ Ronald Peña R
El lunes, importantes líderes de la oposición venezolana respaldaron un importante despliegue naval estadounidense en el Caribe, cerca del país sudamericano, calificándolo de crucial para la restauración de la democracia.
El excandidato presidencial exiliado Edmundo González Urrutia, a quien Estados Unidos considera el líder legítimo de Venezuela, afirmó que el refuerzo militar era “una medida necesaria para desmantelar la estructura criminal” que impide “la restauración de la soberanía popular en Venezuela”.
Añadió que el pueblo venezolano “no tenía otra opción que forzar la salida de este régimen”.
En un video conjunto con González Urrutia, la figura opositora María Corina Machado acusó al régimen de Maduro de tráfico de drogas, minerales, metales, armas y seres humanos, entre muchos otros delitos.
Se hizo eco de la afirmación de Washington de que las bandas criminales venezolanas representan una amenaza real y creciente para la seguridad y la estabilidad del continente americano.
González Urrutia fue el candidato de la oposición en las elecciones presidenciales de julio de 2024.
El recuento de los resultados de la oposición en los colegios electorales individuales le mostró una amplia victoria sobre Maduro.
La afirmación de Maduro de haber ganado legítimamente un tercer mandato de seis años desencadenó violentas protestas, duramente reprimidas, que dejaron 28 muertos y cientos de personas en prisión.
(Con información de EFE y AFP)