Da igual que hable de Hipatia de Alejandría, de Miguel de Unamuno o del mismísimo Cervantes. Las películas de Alejandro Amenábar acaban sintiéndose siempre proyectos tremendamente personales para el director. Aunque acaben envueltas en una producción de época, hablan de los temas que le preocupan y del presente en el que se estrenan. Hay un claro ‘sello Amenábar’ que ha desarrollado desde que arrasara con Tesis hasta El Cautivo, su última película recién estrenada en cines y que ya roza los tres millones de euros en la taquilla.
Con El Cautivo aborda la figura del escritor español más importante de la historia, pero lo hace centrándose en su cautiverio en Argel y hablando de un tema que ha escocido a los más puristas, a aquellos a los que no se les puede tocar los símbolos de españolidad. Aborda la identidad de Cervantes, y eso abarca su identidad sexual, su identidad como escritor y hasta su identidad política.