El director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, ha abierto este jueves el nuevo curso de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras con la presentación de su libro ‘De la democracia en Hispanoamérica’ (Taurus).

Antes de su intervención, el director de Buenas … Letras, Pablo Gutiérrez-Alviz, ha agradecido todo el apoyo que la RAE prestó el año pasado para la exposición sobre los Machado. Igualmente, ha dicho que «en estos días en los que se pone en tela de juicio el poder jurídico, destaca el libro de Santiago Muñoz Machado ‘Riofrío, la justicia del señor juez’, donde habla de la persecución que sufrió por parte del juez Garzón».

También ha intervenido Fernando Iwasaki, que ha dicho que «este libro es esencial para cualquier hispanoamericano. Muñoz Machado ha escrito una obra que acredita y trasluce su querencia hispanoamericana. La magnitud de su investigación es tan fastuosa que hasta la bibliografía podría ser una publicación independiente de 120 páginas».

Por su parte, el director de la RAE ha señalado que este libro «nace al preguntarme por qué algunos países americanos dejan de lado la democracia liberal y la cambian por una democracia participativa. Mi idea no era ver lo frágiles de esas constituciones, sino analizar por qué han abandonado esas democracias liberales».

En ese sentido, ha puesto de ejemplo a países como Venezuela y Bolivia. «Estas nuevas constituciones ponen de manifiesto el fracaso de las democracias liberales», ha subrayado.

Igualmente ha recordado Muñoz Machado que la Constitución de 1812 «es un maravilloso texto en el que se proclama un gobierno para los dos hemisferios. Pero Fernando VII y la independencia de los países americanos hacieron al final que ese sueño fuera imposible».

El conferenciante ha recordado que aunque en estos nuevos países hubo algún intento de instaurar la monarquía, como en México, «la esencia de la democracia americana ha sido republicana».

Según Muñoz Machado, las constituciones americanas copiaron la Constitución de Francia de 1791 y la española de 1812. Esos nuevos textos no funcionaron, pero el director de la RAE ha destacado la idea de que «mi libro no critica la debilidad constitucional americana. Está escrito desde mi admiración».

Asimismo, el director de la RAE lanza la hipótesis de que el constitucionalismo ha fracasado en América ya que «el Estado no pudo funcionar porque no había estados que tuvieran un territorio, una población y un soberano.

Ninguna de las tres cosas han pasado en América, por lo que no hay naciones. Los territorios no estaban bien definidos en América. La beligerancia interna fue mucha. Nueva España por ejemplo perdió la mitad de su territorio por los yanquis».

Además, Muñoz Machado ha dicho que «en América estaban los indios bravos o salvajes que no vivían en comunidad. No existía una población uniforme ni tampoco había un soberano o alguien que mandara. Tras la independencia, las naciones aplicaron la doctrina escolástica sobre el origen del poder. Se decía que el poder venía del pueblo, pero no se sabe quién era el pueblo. Al final había confederaciones de caciques y caudillos, que son los que toman el poder».

Este proceso duró todo el siglo XIX y a partir de 1898 España dejó de tener influencia en América y Estados Unidos tomó un papel predominante en estos países.