Duro Felguera ha dado un paso importante en su plan de reestructuración al firmar la venta de ‘El Tallerón’, su fábrica de calderería pesada en Gijón (Asturias), a Indra por un importe de 3,65 millones de euros. Esta operación se produce en un momento crucial para la empresa, que se encuentra inmersa en un preconcurso de acreedores que vence el 31 de julio.
La firma de ingeniería asturiana confirmó la transacción a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), destacando que, además de las instalaciones, se incluye la subrogación de los contratos de los trabajadores y la concesión administrativa. Esta venta forma parte de la estrategia de desinversión de activos no estratégicos de Duro Felguera, con el objetivo de reforzar su liquidez durante las negociaciones de reestructuración y garantizar la continuidad de la actividad empresarial.
La operación también asegura la permanencia de más de 150 puestos de trabajo vinculados a ‘El Tallerón’. Tras el anuncio de la venta, las acciones de Duro Felguera experimentaron un incremento del 3% en Bolsa.
En un mensaje publicado en LinkedIn, Duro Felguera destacó que este acuerdo va más allá de lo industrial, siendo un ejemplo de responsabilidad compartida y capacidad para encontrar soluciones en contextos complejos. La empresa agradeció a Indra, a las administraciones públicas y al respaldo institucional por hacer posible esta transacción.
La compañía mostró su confianza en que el futuro de ‘El Tallerón’ con Indra será prometedor, generando nuevas oportunidades de colaboración. Duro Felguera reafirmó su compromiso con Asturias, la economía y el empleo, destacando su esfuerzo por construir una empresa más sólida, rentable y sostenible.
Por su parte, el consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, resaltó que las instalaciones se convertirán en una de las fábricas de vehículos y carros de combate más avanzadas de Europa, siendo el centro neurálgico de la producción, montaje e integración de plataformas terrestres.
Los socios de control de Duro Felguera, Prodi y Mota-Engil México, tienen previsto aportar más capital para impulsar la empresa, que se encuentra en un preconcurso de acreedores desde diciembre. El plan de viabilidad presentado incluye un horizonte de 10 años y cuenta con el respaldo del ‘pool bancario’ y la SEPI.
El plan se centra en abandonar áreas con pérdidas para enfocarse en contratos más pequeños, de bajo riesgo y rentabilidad aceptable, como parte de la estrategia para asegurar la viabilidad y el crecimiento sostenible de Duro Felguera.