El Casademont Zaragoza tuvo una presentación demasiado accidentada. El equipo se llevó la victoria (88-74) ante un Benfica excesivamente duro en sus formas, desde luego nada amistoso, mostró que todavía está verde en varios aspectos, pero lo peor fue que perdió a dos jugadores por lesión, Stephens y Stevenson, a poco más de una semana de que empiece lo serio. Lo mejor fue ver a Joaquín Rodríguez reclamando minutos y protagonismo como se debe, en la pista, cambiando un partido que amenazaba con embarrancar cuando irrumpió en la segunda parte para poner otro nivel de energía, aportar puntos y defensa y llevar al equipo a la victoria.

El rival no era el mejor para sacar grandes conclusiones y para colmo, se empleó con excesiva dureza desde el principio, pero podía permitir al Casademont tener una buena presentación, sin una gran oposición enfrente para poder lucir las cosas buenas del equipo, la calidad de los bases, los muelles de Robinson, la defensa de Stephens, las buenas intenciones de Stevenson…. más o menos estaba siendo así, con el Casademont dominando el marcador desde el inicio con una decena de puntos de ventaja , sin grandes alardes pero dejando algunas acciones interesantes que llevarse a la boca. Pero la tarde se empezó a torcer pronto y dejó el mal cuerpo de las lesiones de Stephens y Stevenson en la primera mitad.

En el primer cuarto fue DJ Stephens quien tuvo que marcharse a los vestuarios tras una mala caída en una contra en la que se dañó el hombro derecho. En el segundo parcial fue Erik Stevenson quien se lastimó la rodilla derecha al lanzarse a cortar un balón en el centro de la pista. Ambos regresaron al banquillo ya en la segunda mitad. Dos muy malas noticias, a la espera de las pertinentes pruebas médicas, con la visita del Baskonia para empezar la ACB a la vuelta de la esquina.

El partid fue empeorando un poco más, sin mucho orden, y el Benfica logró enjugar la diferencia para llegar al descanso con el marcador muy igualado (35-32). En la segunda mitad, sin los lesionados, fue el turno de Joaquín Rodríguez en un duelo que ya había cambiado, que ya no estaba en manos del Casademont y que apenas dejaba ver buenas acciones con cuentagotas y, casi siempre, con Robinson y sus espectaculares saltos como protagonista. El hambre del uruguayo levantó al equipo mientras el Benfica seguía empleándose con dureza. Demasiada.

A falta de continuidad y fluidez en el partido, entró en juego el resultado, puesto que el Benfica llegó a darle la vuelta (42-43) mediado el tercer cuarto pero los puntos de Joaquín y la visión de Dubljevic volvieron a estirar la ventaja antes del parcial definitivo (62-52). Ambos fueron los grandes protagonistas de la segunda parte y permitieron al Casademont aumentar la renta hasta el 75-57 que parecía suficiente mientras el Benfica seguía empleándose con demasiada dureza, recibiendo incluso alguna técnica por ello.

El final fue algo más tranquilo, con tres jugadores del Benfica fuera por personales, y Joaquín sumando en cada acción para ganarse el merecido aplauso de la grada. Para poco más sirvió el partido, cerrado con una victoria que sigue dejando algunas dudas, en el ‘5’, por ejemplo, a las que ahora añade el estado del hombro de Stephens y la rodilla de Stevenson. En ocho días empieza lo serio y ahí es mejor no dudar.

FICHA TÉCNICA

CASADEMONT ZARAGOZA: Trae Bell-Haynes (19), Santi Yusta (5), Miguel González (5), Devin Robinson (11), Bojan Dubljevic (16) -equipo inicial-, Joel Soriano (6), DJ Stephens (2), Erik Stevenson (4), Marco Spissu (1), Sadik Kabaca (2), Lucas Langarita y Joaquín Rodríguez (12).

SL BENFICA: Broussard (8), Crandall (15), Dziewa (2), Yussuf (4), Sueing (15), Relvao (10), McEwen (12), Romdhane, Gameiro (6), Francisco, Silva (2), Andrade y Gomes.

PARCIALES: 21-9, 14-23, 27-20 y 26-22.

ELIMINADOS: Robinson, en el Casademont; Crandall, Dziewa y Yussuf, en el Benfica.

INCIDENCIAS: 3.439 espectadores en el pabellón Príncipe Felipe. Estuvieron presentes el equipo femenino y el U22.