La presencia de Sassa de Osma, y más cuando hablamos de looks de invitadas, es una garantía de estilo indiscutible. En ella coinciden dos valiosas características: una elegancia innata que no se aprende y una voluntad por experimentar, divertirse con la moda y no ir a lo fácil, que suele tener como resultado el tipo de conjuntos que copiaríamos con los ojos cerrados. Hoy, en la boda de Lucía Entrecanales y Laszlo Bene en el hospital de Tavera de Toledo, nos ha dado la enésima prueba de este saber hacer que posee en lo tocante a la moda. Porque no todos los días vemos un vestido camisero que algunas podrían elegir para ir a la oficina, elevado a la categoría de diseño apto para una boda. Pero hay algo en la manera de elegir los accesorios y en su modo de defender el estilismo que convierte a esta pieza en el diseño de invitada más especial.

Sassa de Osma llegando a la boda de Lucía Entrecanales y Laszlo Bene en Toledo. lleva melena suelta vestido camisero de...

Sassa de Osma llegando a la boda de Lucía Entrecanales y Laszlo Bene en Toledo.© GAA/Gtres Online

Manga larga, escote cerrado totalmente -con un naíf cuello bebé y un lazo aún más dulce-, fila de botones, cadera baja, estampado de flores otoñales… Lo cierto es que este podría ser el perfecto vestido de rentrée para una comida con amigas, pero para Sassa de Osma ha sido su candidato perfecto para convertirse en la invitada más elegante del lugar. Y para conseguirlo, no ha necesitado un gran tour de force; de hecho, no hay nada complicado en el look. Sí existe, en cambio, una elección de accesorios especial. Porque, aunque a simple vista parezcan discretos, el intrincado juego de geometrías y volúmenes de su clutch de mimbre ya añade interés a la ecuación por sí solo. Y ese infinito tacón de las sandalias doradas coloca al vestido en un inesperado nivel de fiesta que no vimos venir en un primer vistazo.