De entrada, parecía el peor rival posible y tardó poco en demostrarlo. Cuando la Supercopa se presenta como epílogo de la pretemporada y antesala de … la temporada, que un equipo haya empezado ya su competición oficial le hace más peligroso. Y si esa competición es de calibre Euroliga y pasa por una eliminatoria en la que este jueves remontó 21 puntos en contra, todavía más. Poco pudo hacer el equipo de Bernat Canut ante el torbellino zaragozano, que, para completar la tormenta perfecta, hizo del Palacio de los Deportes de Huesca su propio pabellón dado el ambiente de la grada.

Esta superioridad del Casademont, uno de los equipos que mejor se ha movido en el marcado de fichajes en toda Europa, se hizo más palpable conforme avanzaban los minutos. Aunque el Hozono Jairis intentó seguir su estela anotadora (seis de las primeras nueve canastas del partido fueron triples), cuando las de Cantero dijeron de subir líneas en defensa poco se pudo hacer: a partir del minuto 14 no hubo ninguna canasta alcantarillera más hasta el descanso.

Y, en la segunda parte, muy parecido. Las aurinegras lograron reducir veinte puntos de desventaja (50-30, minuto 23) a un solo dígito de diferencia (57-48, minuto 29), pero con el paso de los minutos la gasolina solo parecía menguar en un depósito, y entre el minuto 32 y el final del partido solo pudieron anotar las del Hozono Jairis una canasta más, ya con las mañas en más de veinte puntos de ventaja.

Casademont Zaragoza

Ortiz (3), Pueyo (15), Vorackova (8), Fingall (7) y Hempe (22) -quinteto titular- Leite (2), Bankole (7), Flores (1), Oma (2), Hermosa, Gueye (8) y Mawuli (9).

81

59

Hozono Global Jairis

Ayuso (3), Prieto (4), López-Sénéchal (14), Walker (5) y Massey (5) -quinteto titular- Alarcón (0), López, Mataix (6), Cvitkovic (9), Vonleh (13) y Alguacil.

  • Parciales.
    28-19, 15-11 (43-30), 20-19 (63-49) y 18-10 (81-59).

  • Árbitros.
    Sandra Sánchez, Fernando Ibáñez y Jordi Domingo.

  • Incidencias.
    Palacio de los Deportes de Huesca, unos 3.000 espectadores. Semifinal de la Supercopa LF Endesa.

Con la lengua fuera

Y es que la gran diferencia de esta noche estuvo en el ritmo competitivo que ha ganado un equipo al que, además, se le sale el talento por los bolsillos. La espectacular interior Hempe pareció continuarlo donde lo dejó en el pasado ‘playoff’ contra las de Alcantarilla, y diez de los quince primeros puntos de su equipo llevaban su firma. En un partido en el que nadie parecía fallar, un mal cierre del primer cuarto daba la primera ventaja significativa a un Casademont que sumaba ocho puntos en los últimos 1:10 (28-19).

De lo más positivo que se lleva el Hozono Jairis es, sin duda, el debut profesional de su joven Aaronette Vonleh. Su irrupción en el partido dio equilibrio interior a su equipo, que se resistía a hincar rodilla tan rápido (32-27, minuto 14). Sin embargo, la inmisericorde presión defensiva del Casademont a la vuelta de un tiempo muerto de Cantero, sin miedo al contacto, cambiaba el partido. Restaban muchos segundos al ataque alcantarillero, con diez pérdidas al descanso y siete de ellas entre Ayuso y Prieto (43-30).

El Hozono Jairis había acabado pidiendo descanso, pero lo peor estaba por llegar. Empezó la segunda parte con dos violaciones de 24 segundos seguidas y un triple de Pueyo, que la de fallar no se la sabe, ponía veinte de renta (50-30, minuto 23).

Por poco tiempo

Con tan significativa diferencia, las de Canut entendieron que entraban en un partido diferente. Más cerebrales, buscaron orgullo en defensa y simplicidad en ataque, y encontraron un parcial de 0-10. 50-40 y, ahora, era Cantero quien lo tenía que parar. El partido entró en un escenario de alternativas en que el Hozono Jairis, si bien aguantaba en el marcador, penaba demasiado cualquier error que el talento zaragozano no permitía, y, aunque llovía menos, estaba más lejos que hacía diez minutos (63-49, final del tercer cuarto).

Jugadoras como López-Sénéchal, Mataix o la propia Ayuso, aunque no fuera en anotación, exteriorizaban otro lenguaje corporal. Pero un conservador Cantero en la rotación volvía a exprimir el partido. Puesta en juego de su quinteto de gala, dos contra uno pasada la mitad de pista y duro y definitivo golpe sobre la mesa: parcial de 11-0, nueva máxima ventaja (74-53, minuto 36) y cómodo final con un colchón cada vez más gordo.

En lo que será la reedición de la Supercopa de hace un año en Alcantarilla, el Casademont desafiará por el título al Valencia, último campeón, que ganó en su semifinal al Perfumerías Avendia (70-75).