30/09/2025 – 11:18 Actualizado: 30/09/2025 – 11:26

Después de casi dos décadas juntos, Nicole Kidman (58) y Keith Urban (57) han puesto fin a su matrimonio. La noticia, adelantada por el portal estadounidense TMZ y confirmada por ‘Daily Mail’, ha conmocionado tanto a sus seguidores como a la industria del entretenimiento, sobre todo porque la pareja había celebrado en junio su 19.º aniversario con una publicación conjunta en redes sociales y apenas en mayo se habían mostrado cómplices en los Premios de la Academia de Música Country.

Según fuentes cercanas, la ruptura no habría sido una decisión mutua. Kidman, profundamente “desconsolada”, habría intentado mantener a flote la relación por el bien de sus hijas, Sunday Rose (17) y Faith Margaret (14). Las apretadas agendas de ambos —entre rodajes de la actriz y giras del músico— habrían terminado por distanciarlos irremediablemente.

La historia de amor entre la actriz ganadora del Oscar y el cantante de country comenzó en 2005 y no tardó en consolidarse: en 2006 se casaron en Sídney ante un buen número de estrellas australianas. Apenas unos meses después, Urban ingresaba en una clínica de rehabilitación para tratar sus adicciones, un momento crítico que, según ambos contaron después, les unió todavía más y puso a prueba su compromiso. Kidman siempre defendió públicamente que aquella experiencia reforzó su vínculo y les permitió construir una familia sólida.

Con el tiempo, la pareja se convirtió en uno de los matrimonios más fotografiados en alfombras rojas y entregas de premios. De los Globos de Oro a la Gala del Met, pasando por los Oscar o los Grammy, Urban y Kidman no solo exhibieron su complicidad, sino que a menudo se dedicaron declaraciones de amor en público. Incluso en el escenario, el músico llegó a interpretar canciones dedicadas a su esposa, mientras ella le llamaba su “profundo, profundo amor”.

Kidman y Urban, en junio, en una de sus últimas apariciones públicas. (Getty)

Pero más allá del plano sentimental, el divorcio abre un complejo capítulo legal y financiero: el reparto de un auténtico imperio inmobiliario valorado en más de 280 millones de dólares (238 millones de euros). A lo largo de sus 19 años de matrimonio, la pareja adquirió propiedades en Australia, Estados Unidos y Nueva York, construyendo una de las carteras más llamativas de Hollywood.

Entre sus joyas destacan una finca campestre en los Southern Highlands australianos, comprada en 2008 por 6,5 millones de dólares y hoy valorada en cerca de 12 millones; un lujoso dúplex en Manhattan adquirido por 13,5 millones en 2010; una mansión en Beverly Hills de 6,7 millones; y una residencia de 20 habitaciones en Nashville, epicentro de la música country, por casi 5 millones.

La pareja, en la gala MET. (Getty)

A esto se suma su apuesta más singular: hasta seis apartamentos en un mismo rascacielos de Sídney, el exclusivo Landmark Latitude de Milsons Point, con vistas privilegiadas a la bahía. Solo en ese edificio desembolsaron unos 27,5 millones de dólares, celebrando incluso fiestas de Año Nuevo con familia y amigos en el ático.

Las propiedades, muchas registradas a nombre de distintas sociedades, deberán ser objeto de negociación en la eventual separación legal. Por ahora, ni Kidman ni Urban han hecho comentarios públicos sobre cómo planean repartir los bienes, aunque su entorno advierte de que la complejidad patrimonial podría alargar el proceso.

Después de casi dos décadas juntos, Nicole Kidman (58) y Keith Urban (57) han puesto fin a su matrimonio. La noticia, adelantada por el portal estadounidense TMZ y confirmada por ‘Daily Mail’, ha conmocionado tanto a sus seguidores como a la industria del entretenimiento, sobre todo porque la pareja había celebrado en junio su 19.º aniversario con una publicación conjunta en redes sociales y apenas en mayo se habían mostrado cómplices en los Premios de la Academia de Música Country.