Adiós a las maderas oscuras en la montaña. Casas de poca luz, vuestra era ha tocado a su fin. Así al menos lo decretó Mónica para la suya en Cerler, Huesca, ¡una casa por la que nadie daba un duro! Hasta que ella, con su inspiración y la ayuda de su amiga la arquitecta Tote Moreno, de Factoría UDA, convirtió esta borda –edificación típica del Pirineo–, de 1870, con mucha piedra y madera, pero una casa oscura a fin de cuentas, en este prodigio que llamaríamos de la ‘Nueva Montaña’ que vemos ahora.

Vestidores poco eficientes

¡Es perfecto!

Primark da con la solución perfecta a la falta de armarios: este colgador (por tan solo 4€) no necesita taladro y es muy elegante