BARCELONA. Fiel a su lema, “Building immunity for a healthier world”, la farmacéutica biotecnológica anunció ayer en BIOSPAIN 2025 que lidera el proyecto europeo SPEEDCELL, cuyo objetivo es reducir a 100 días el desarrollo de vacunas y biológicos en situaciones de emergencia. Fundada en 1971, la empresa está enfocada en la prevención para la salud animal y humana (One Health) con una amplia gama de vacunas y un servicio avanzado de diagnóstico.
La pandemia de la COVID-19 puso a prueba el sistema sanitario global para responder con rapidez y eficacia a emergencias sanitarias de gran escala. Como explicaba en rueda de prensa Laura Ferrer, directora de I+D de la División de Salud Humana de HIPRA, la emergencia sanitaria nos hizo conscientes de la necesidad de disponer de una infraestructura propia para la producción de vacunas. “Evitamos así la dependencia de otros países o el retraso en el acceso a medicamentos. La pandemia puso de manifiesto una vulnerabilidad que no nos podemos permitir”.
Solidez innovadora
A lo largo de los próximos 4 años, SPEEDCELL pretende establecer una plataforma de producción más rápida, flexible y eficiente, capaz de entregar nuevos productos biológicos en solo 100 días. Con una financiación de 3,96 millones de euros a través del programa europeo EU4Health, la iniciativa se centra en la optimización de procesos de desarrollo y fabricación basados en líneas celulares, utilizadas ampliamente en la producción de vacunas y productos biológicos.
Ferrer detallaba que la tecnología de proteínas recombinantes aporta una serie de beneficios frente a otras alternativas. “Los productos generados en la plataforma son más seguros, facilitan una logística más sencilla -un punto clave para llegar a determinadas geografía a tiempo- y tienen mejor aceptación entre determinados grupos de población, lo que incrementa la adherencia a la solución”.
Una declaración de intenciones
SPEEDCELL, liderado y coordinado por las diferentes empresas del grupo HIPRA, se desarrolla íntegramente en España. Eduard Viladesau, director General de HIPRA Biotech Services (la CDMO de HIPRA), señalaba por su parte que este hito posiciona a la empresa como un actor clave ante futuras pandemias.”Queremos convertirnos en los más rápidos en ofrecer una respuesta en momentos de crisis de salud. El proyecto reafirma también nuestro compromiso con la construcción de un modelo biofarmacéutico europeo más fuerte y autónomo”.
Una vez desarrollada esta tecnología, podrá ponerse a disposición de terceros a través de HIPRA Biotech Services. Su director confía en que este conocimiento compartido tendrá “un efecto multiplicador” para la autonomía estratégica de Europa. “SPEEDCELL no es solo tecnología, es una declaración de intenciones. Está alineado con la Europa que queremos ayudar a construir; un territorio que invierte en ciencia y que protege a sus ciudadanos. Seguiremos trabajando para que la innovación sea el motor de una mejor salud que llegue a tantas personas y empresas como sea posible”.
Más pasos adelante
Puesta en marcha en enero de 2025, HIPRA Biotech Services está superando las mejores expectativas de la empresa. “En la industria CDMO, los plazos de venta son muy largos. Hasta que las relaciones se consolidan con confianza, suelen pasar entre 18 y 24 meses. En apenas medio año, conseguimos nuestro primer cliente”, afirmaba el directivo. Viladesau observa como hecho diferencial que “cuando vienen a visitar nuestras instalaciones y comprueban por sí mismos nuestras capacidades técnicas y humanas, quedan impresionados”.
HIPRA ya había sido seleccionada por la Comisión Europea y la agencia HERA para formar parte del proyecto EU FAB, una red de capacidades de fabricación en estado de preparación permanente para vacunas y medicamentos críticos. Esta iniciativa, en la que HIPRA es uno de los cuatro fabricantes europeos participantes, tiene como objetivo garantizar una respuesta inmediata ante futuras emergencias sanitarias.
La compañía dedica más del 10% de su facturación anual a actividades de I+D que se concentran en la creación y aplicación de los últimos avances científicos para el desarrollo de vacunas. Sus equipos de I+D trabajan con una amplia gama de patógenos, algunos de los cuales están incluidos en la lista de la OMS como patógenos de riesgo para futuras pandemias. La empresa también desarrolla dispositivos médicos y servicios de trazabilidad para la salud animal.