El miércoles 15 de octubre se presenta en la Biblioteca de Castilla-La Mancha, en Toledo, el libro ‘Castilla-La Mancha fea’, una obra editada por Almud que da cuenta de los principales errores arquitectónicos y urbanísticos cometidos durante la … etapa de la transición en la región.
La obra, cuya presentación fue suspendida el pasado 28 de abril al coincidir con el ‘apagón’ energético que dejó a España a oscuras, se pone ahora ante la vista de los lectores en un acto que se celebrará a las siete de la tarde y al que asistirá el editor y colaborador de ABC Alfonso González-Calero; el coordinador del texto, José Rivero, arquitecto, y su colega toledano José Ramón González de la Cal, autor del capítulo dedicado a la provincia de Toledo. También arquitectos han escrito sobre los desmanes urbanísticos cometidos en el resto de provincias castellanomanchegas en los últimos 50 años.
González-Calero ha explicado a ABC que esta obra toma su nombre del libro ‘España fea’, del que es autor Andrés Rubio, periodista especializado en arquitectura a quien Almud Ediciones pidió permiso para reproducir, a escala castellanomanchega, el atrayente título de la obra. «Nos dijo que estaba encantado, que no solo no le importaba que le copiáramos el título sino que le parecía estupendo porque Castilla-La Mancha salía poco en su libro».
Añade el editor de Almud que «no se trata tanto de edificios feos, que hay unos cuantos horrorosos -como se ve en las curiosas fotografías del libro-, sino de problemas urbanísticos, acciones mal hechas desde el punto de vista urbanístico y patrimonial, como grupos de chalets construidos en medio del campo en zonas protegidas medioambientalmente, y cosas así».
El arquitecto José Ramón González de la Cal escribe el capítulo dedicado a Toledo. «Al contemplar la figuración de nuestras ciudades y pueblos en sus periferias lo feo se hace aún más visible…cuanto más nueva y moderna, más fea es la ciudad», dice, y argumenta que no hay ciudad que tenga unas afueras feas, «algo que se hace aún más evidente en aquellas que están ungidas por ser Patrimonio de la Humanidad: Cuenca y Toledo. Prueben a llegar a ellas en el tren de alta velocidad, por sus ventanillas en movimiento sentirán entrar por el ano de la ciudad. Lugares donde todo es posible y abunda toda una cusuísitica de las heces de la cultura contemporárea«. Para no perdérselo.