A través de obras que forman parte del legado de la pinacoteca, pero que no están expuestas habitualmente, el Museo de Burgos celebra el centenario de Luis Sáez (1925-2025). La exposición ‘Bellamente aterrados’ reúne 40 piezas de entre las más de 600 cedidas al centro y que suponen «lo mejor de la colección», según el comisario y director del museo, Luis Araus.
La exposición presentada de forma cronológica comienzan con óleos de los años 50 y 60, cuando ejercía una abstracción que él considera paisajes. A continuación se han colgado cuadros de los 70 y 80, cuando aparece la figuración y esas formas y cuerpos torturados. La muestra se completa con dibujos de su época de formación en Madrid y grabados en aguafuerte, junto a una vidriera, una incursión particular en esa disciplina. «Es un deber del Museo de Burgos exponer la obra de Luis Sáez, pero es una obligación gustosa», ha añadido Araus. El director de la pinacoteca ha afirmado también que, al celebrar el centenario de Luis Sáez, le podemos considerar «un clásico de los que están en actualidad permanente».
El hijo del pintor, Javier Sáez, ha destacado lo «emotivo» de una exposición que se abre el mismo día del cumpleaños del artista y con la que «se hace memoria de lo que ha supuesto su aportación pictórica». Tras destacar la importancia que su padre daba al aspecto formal y estructural de su obra, más allá del contenido, ha valorado que la muestra se haga desde una institución pública.
Sobre la ampliación del museo, una aspiración que va unida a la donación que hizo el pintor dado que lo hizo con la promesa de disponer de «un espacio digno», el delegado de la Junta, Roberto Saiz, ha insistido en «la voluntad de la Junta de cumplir ese deseo del museo, de su director y de toda la ciudadanía», aunque tampoco ha obviado que existe «un escenario incierto» con respecto al tema del presupuesto.
La exposición estará abierta hasta finales de enero. Y junto a esta actividad, el instituto Pintor Luis Sáez pinta estos días un mural en el exterior del edificio, dedicará su semana cultural al artista, creará un mosaico humano, organizará concursos y charlas y algún otro evento hasta marzo, al igual que la coral que lleva su nombre, que le dedicará un concierto en noviembre