Franco Colapinto vivió una verdadera «montaña rusa emocional» en su primera experiencia tangible en la Fórmula 1 durante la temporada 2024 con Williams. El piloto argentino mostró resultados sólidos en sus primeras carreras, pero luego sufrió incidentes justo cuando el interés de grandes equipos, como Red Bull, se hacía más fuerte.
El actual jefe de la escudería británica, James Vowles, fue el encargado de desenmascarar el origen de estos problemas, señalando un factor que trasciende lo técnico: la presión psicológica.
La autoexigencia: la causa real de los choques de Colapinto
Vowles, quien ascendió al joven piloto a la máxima categoría, explicó en el popular podcast de F1, Beyond the Grid, por qué Colapinto sufrió una serie de choques en la parte final del 2024. La clave no estuvo en la falta de talento, sino en una carga mental autoimpuesta que afectó su desempeño. El principal problema, según el ingeniero británico, fue la autoexigencia generada por el momento.
«Necesito demostrarle al mundo que soy lo suficientemente rápido para ganarme un lugar en la Fórmula 1 el próximo año», esa era la enorme carga mental que Colapinto llevaba sobre sus hombros. Vowles identificó que esta presión fue la causa de las «situaciones que comenzaron a repetirse», en clara referencia a los accidentes que marcaron el cierre de su paso por la escudería.
El rendimiento inicial de Colapinto había sido prometedor y generó altas expectativas. Vowles destacó que el debut del argentino en Monza «fue fantástico» y que su actuación en Bakú fue «extraordinaria», resaltando su gran capacidad de adaptación rápida.
El «factor Red Bull»: la presión que desestabilizó su mente
La ansiedad por asegurar su futuro en la máxima categoría fue el factor que detonó la inestabilidad. A medida que la temporada avanzaba y los pocos asientos disponibles se iban cerrando, la tensión de Colapinto se incrementó exponencialmente. En este contexto, los rumores que lo vinculaban a un posible lugar en el equipo Red Bull Racing o su filial, lejos de ser una buena noticia, solo aumentaron la presión.
Consultado específicamente sobre si este interés externo de Red Bull lo había distraído, Vowles fue muy claro: «¿Desconcentrado? No. Pero, ¿lo influyó? Definitivamente». El jefe de Williams explicó el devastador efecto psicológico: «Cuando deseas algo con tanta intensidad, a veces no logras rendir al mismo nivel que antes». El éxito inicial de Colapinto, al sumar puntos y atraer la mirada de grandes equipos, se convirtió, paradójicamente, en una fuente de presión que lo desestabilizó y se transformó en su «peor enemigo».
Vowles defiende al argentino: «Sigue siendo muy, muy rápido»
Pese a los incidentes, James Vowles fue enfático al defender el talento de su piloto. Destacó que es «fácil sobreexigir a estos monoplazas», y que este tipo de errores son algo normal en la actual generación de coches de Fórmula 1. «Probablemente sea el error más común que todos cometemos. Pero es difícil evitarlo», reconoció.
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Franco tuvo un gran estreno, pero no pudo terminar el 2024 como lo empezó.
Williams Racing
A pesar de los choques, Vowles dejó claro que Colapinto sigue teniendo el talento necesario para la F1: «Sigue siendo rápido, muy, muy rápido». Las declaraciones del jefe de Williams sirven como una lección de liderazgo, demostrando que en el alto rendimiento, la presión por demostrar puede ser el verdadero escollo para cualquier deportista o ejecutivo.