Los 40 Pilar Pop Zaragoza vuelve a demostrar que las Fiestas del Pilar siguen siendo uno de los eventos del año
Las Fiestas del Pilar son sinónimo de tradición, alegría y música. Y como cada año, Los 40 Pilar Pop volvieron a ser el punto de encuentro donde miles de personas disfrutaron de una jornada que unía generaciones enteras bajo una misma estrella.
Desde primera hora de la mañana ya se intuía que la cita iba a ser importante. Las primeras filas se llenaban mientras los técnicos ajustaban los últimos detalles y Dani Moreno, el locutor de Los 40, calentaba motores para una jornada que prometía mucho.
La Plaza del Pilar en Zaragoza con el evento de Los 40 Pilar Pop | El Generacional (Izan Ramírez)
Samuraï y Paul Thin: la energía inicial
El evento arrancaba con una artista que se ha ganado el cariño del público a base de sensibilidad y mucho amor propio: Samuraï. Su voz, dulce pero firme, fue la encargada de abrir el telón con temas como Dejándolo Pasar o Palabra Prohibida, canciones que reflejan su esencia y que se convirtió en una manera perfecta de inaugurar la noche.
Tras ella, el escenario se transformó en pura electricidad con Paul Thin, uno de los nombres más esperados de la tarde. El artista volvió a demostrar la razón por la cual es lo que es, abriendo con Vértigo y terminando con ESC, un tema muy especial para sus fans. Su energía y la conexión, como era de esperar, fue el motor que encendió la plaza.
Paul se mostró emocionado al agradecer al público zaragozano su apoyo constante, consciente de que en cada concierto, sus seguidores le devuelven con creces todo el cariño que transmite sobre el escenario. Su paso dejó claro que su música está más viva que nunca y que vienen muchas cosas nuevas.
Paul Thin actuando en Zaragoza | El Generacional (Izan Ramírez)
Ruslana y Walls: dos estilos, misma intensidad
El turno de Ruslana llegó para dar un giro elegante al evento. La artista combinó con la potencia de su voz y su corazón, que conquistó a todos los presentes. Interpretó su tan mítica balada y no faltaron toques de rock ni canciones tan potentes como Tengo Un Don, que hicieron vibrar la plaza por completo.
Acto seguido, el escenario recibió a Walls, otro de los grandes nombres de la noche. Sin banda, pero con una energía arrolladora, el murciano demostró que no necesita mucho más que su presencia y su música para llenar el espacio. Abrió con Mi Nena y sorprendió al público con ¿Cuántas penas vale tu amor?, su nuevo tema, lanzado justamente ese mismo día.
El momento álgido de su actuación llegó con Haz Lo Que Quieras Conmigo, uno de los grandes himnos de su repertorio. Frente a miles de personas, Walls se abrazó simbólicamente con el público zaragozano, un gesto que selló una de las actuaciones más emotivas de la noche.
Ruslana junto a sus bailarinas en Zaragoza | El Generacional (Izan Ramírez)
Naiara, Depol y Nil Moliner: el cierre perfecto para una noche inolvidable
Y entonces llegó ella, Naiara, la artista local más esperada de la noche. Con su carisma y su fuerza, vuelve a demostrar que Zaragoza es y siempre será su casa. Cantó varios de sus temas más conocidos y dedicó una canción especial a su ciudad, un momento que desató la emoción entre sus paisanos, que la ovacionaron de principio a fin.
El ambiente siguió en lo más alto con Depol, quien llegó al escenario con el impulso de un nuevo lanzamiento: su último disco, estrenado ese mismo día. Su actuación como no, explosiva con su energía pop, con un repertorio cargado de ritmo que hizo saltar a todos los asistentes.
La guinda del pastel la puso Nil Moliner, que con su impecable banda cerró la noche por todo lo alto. La basílica del Pilar de fondo, el público iluminando con luces y la canción Libertad sonando como un himno fueron el cierre perfecto de un evento que ya forma parte de la historia de cada edición de las fiestas de una ciudad.
Nil Moliner iniciando su concierto en la Plaza del Pilar de Zaragoza | El Generacional (Izan Ramírez)
Cuando los fuegos artificiales iluminaron el cielo, Dani Moreno agradeció a todos su presencia y la Plaza del Pilar explotó en aplausos. Era el fin de una noche que lo tuvo todo: talento, conexión y abrazos que solo Zaragoza sabe dar.
Una vez más, Los 40 Pilar Pop demostró que la música es tan amplia que cuando los artistas y el público se unen, el resultado al fin y al cabo solo puede ser uno: la magia. Las Fiestas del Pilar siguen a su ritmo y aquí no paran ni un solo segundo.
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