En 2007, Diane Keaton sumó otra pieza notable a su colección de hogares con historia: la Alfred Newman House, diseñada por Lloyd Wright, hijo del legendario Frank Lloyd Wright. Ubicada en Rustic Canyon, en pleno Pacific Palisades, la casa de aire mid-century modern se alzaba sobre un terreno de más de media hectárea y ofrecía 400 m2 de líneas limpias, ladrillo visto, hormigón y 5 dormitorios perfectamente integrados en el entorno.
Fiel a su estilo, Keaton actualizó la cocina, restauró la carpintería original y los muebles empotrados, y transformó toda la segunda planta en una suite principal acristalada. Una reforma delicada, con respeto al legado y visión contemporánea, que resultó ser también una buena inversión: compró la vivienda por 9,1 millones de dólares (7,83 millones de euros) y la vendió dos años después por 10,75 millones (9,25 millones de euros).
La casa ideal para el retiro de una estrella
Aunque el icono del cine solía inclinarse por lo rústico, lo artesanal y el encanto mediterráneo, Diane Keaton sorprendió con la compra de una casa estilo Cape Cod en Pacific Palisades. Adquirida por 5,6 millones de dólares (4,82 millones de euros), la vivienda –de construcción reciente, finalizada en 2009– reunía todos los ingredientes de un retiro de estrella: cine en casa, gimnasio, dos barras de cócteles, vinoteca y una azotea con vistas al océano.
Con 6 dormitorios, 9 baños y 3 plantas, el interior ofrecía lujo moderno, mientras que en el exterior brillaban una piscina, un spa y hasta una sala de estar al aire libre con chimenea propia. Keaton hizo algunos retoques estéticos y puso la propiedad a la venta en 2015 por 6,95 millones (5,9 millones de euros).

Diane Keaton se compró una casa en la exclusiva zona de Pacific Palisades, en Los Ángeles.© Stella Levi
Un diseño propio que partió de cero
Su proyecto más ambicioso no fue una restauración, sino una creación desde cero. Diane Keaton diseñó su última residencia en Sullivan Canyon, una casa de más de 740 m2 que da nombre a su tercer libro: The House That Pinterest Built. Y no es una metáfora. La actriz armó esta vivienda a partir de años de imágenes guardadas, referencias industriales, texturas y luz.