Nacida en Zaragoza y con raíces turolenses en la parte paterna y mañas en la materna, Ana Mayordomo se mudó a Estados Unidos con solo 13 años y allí descubrió en el jiu-jitsu mucho más que un deporte. Lo que comenzó como una forma de reencontrarse consigo misma se ha transformado en lo que empieza a ser una carrera brillante en un deporte totalmente controlado por Brasil y Estados Unidos. Oro en los ADCC EMEA Trials y en el IBJJF Pan No-Gi Championship, su boom mediático llegó tras convertirse en la primera española en ganar en la UFC BJJ, la reciente promoción dedicada al jiu-jitsu que ha montado la conocida organización. En esta entrevista con Aragón Digital, la luchadora zaragozana nos habla de cómo está viviendo estas semanas tras consagrarse en su deporte, además de relatar cómo fueron sus inicios y lo que espera del futuro.
PREGUNTA.- Lo primero de todo, ¿quién es Ana Mayordomo?
RESPUESTA.- Es una atleta española de jiu-jitsu que es cinturón negro y que acaba de ganar la selectiva europea de una organización que se llama ADCC, su debut por finalización en la UFC BJJ y aparte el Panamericano sin Kimono de este año en la categoría de cinturón negro. Y todo esto lo ha hecho en 29 días.
P.- Muchas emociones en poco tiempo…
R.- No acabo de asimilarlo todo porque hace una semana y media, casi dos de todo esto. Y desde el combate de la UFC, el boom mediático ha sido considerable. No me hacen más que llegar mensajes de felicitaciones, de gimnasios que me quieren contratar y de gente que no sabía de este deporte pero que son españoles y obviamente los españoles apoyamos mucho a nuestros atletas. Entonces, pues la verdad es que liadilla, pero súper agradecida por todo.
P.- ¿Cómo fue ese combate en la UFC?
R.- Fue sin duda la organización más profesional para la que he competido. Mi objetivo era no solo ganar, sino tener una pelea emocionante y una finalización vistosa y salió todo muy bien.
No me di mucha cuenta de lo que había logrado hasta que se acabó todo
P.- ¿Qué se siente al ser la primera española en ganar un evento de este tipo?
R.- En verdad no pensé en ser la primera española en hacerlo. Cuando anunciaron el evento y vi las banderitas debajo de cada de cada foto de cada atleta, me percaté de que era la única española y la única atleta, tanto en la categoría masculina como femenina, que no era ni brasileña ni norteamericana. Además, gané el combate de la UFC el día dos de octubre en Las Vegas y el día cuatro ya estaba disputando el Panamericano en Nueva York. Entonces, no me di mucha cuenta de lo que había logrado hasta que se acabó todo. Obviamente en el momento de ganar en la UFC tuve mucha emoción y ganas de representar a España y a los atletas más internacionales pero en ese momento no tenía tanta conciencia del hecho de ser la primera o la única española.
P.- Sobre el cuadrilátero siempre se te puede ver un brazalete con la bandera de España, ¿también tienes algún símbolo de Zaragoza y Aragón?
R.- Pues sí, tengo la típica cinta de la Virgen del Pilar y también un collar de oro de la Virgen. Obviamente para competir no puedes llevar ni pulseras ni collares porque se engancharían, pero en el día a día sí los llevo. Aparte lo del brazalete fue que se me ocurrió un día, me lo mandó mi madre y ya llevo unos años llevando ese brazalete cada vez que compito.

La zaragozana siempre luce un brazalete con la bandera de España. Foto: Anamayor_bjj
P.- Unos gestos que pueden aproximar a más seguidores.
R.- Claro, la idea de la UFC es atraer a la gran base de fans de MMA que tiene a los eventos que ha creado únicamente de jiu-jitsu (UFC BJJ). Y aunque nunca se me han dado bien las redes sociales y era una un problema de actitud por mi parte el de no querer promocionarme, me di cuenta de que, por ejemplo, tengo dos hermanos mayores y en mi casa siempre se ha visto el deporte por los españoles. Entonces al ser la única que hablaba español en toda esa cartelera, dije voy a hacer el esfuerzo de hacer entrevistas para grabar contenido. Por ejemplo, a la hora de que me entrevistaran justo después de la pelea hice la entrevista en inglés pero también les pedí si podía decir algo en español y creo que eso cayó muy bien. El brazalete y lo de pintarme la cara ha sido relativamente mediático y fue el darme cuenta de que podría de verdad conectar con el público español que en verdad es de los que más apoyan a sus atletas.
INICIOS EN EL JIU-JITSU
P.- ¿Cuándo empezó tu historia con el jiu-jitsu?
R.- A los trece años por motivos laborables de mi padre me mudé a Estados Unidos y a los 16 salía con un chico que hacía kick boxing y muay thai. Le fui a ver a un torneo y me percaté de una pelea en la categoría femenina y me llamó la atención. Entonces me apunté a un gimnasio de kick boxing y a los seis meses aunque ya había roto con el chico, alguien me convenció de probar una clase de jiu-jitsu brasileño. La clase la impartió mi entrenador de toda la vida a estas alturas y exluchador de la UFC, Elliot Marshall, y desde ese momento compaginé el jiu-jitsu y el kick boxing durante dos-tres meses. Pero conforme pasaba el tiempo me di cuenta de no me gustaba que me pegaran y de que en verdad me gustaba más el jiu-jitsu. Entonces con 16 años y medio empecé con el jiu-jitsu en diciembre del 2016 y al par de meses competí por primera vez y me enganché.
El jiu-jitsu fue como algo propio con lo que me podía identificar
P.- ¿Qué es lo más te llamo de este deporte?
R.- Es un deporte que te mantiene presente en todo momento y al ser de contacto, a mí me parece que tiene un elemento como meditativo. Aparte, también fue la idea de que era un deporte que elegí por mí misma, porque de pequeña hice deporte, sobre todo tenis y baloncesto, pero en verdad lo hice porque era lo que hacían mis dos hermanos mayores y lo lógico era apuntarme a mí a lo mismo. Pero en verdad esos deportes nunca me llamaron demasiado y además, no tuve la mejor experiencia a la hora de practicarlos. Entonces el jiu-jitsu fue como algo propio con lo que me podía identificar y que de verdad podría decir que había elegido por mi cuenta.
P.- ¿Y cómo tomaste el paso de entrenar a competir?
R.- Para mí siempre fue difícil porque de pequeña no tenía la autoestima muy alta y creo que nunca se me dio bien gestionar los nervios a la hora de competir. Hasta cuando tenía partido de baloncesto los sábados, jugaba como a medio esconderme, a hacer como muy bien cómo para que no me miraran. A mí nunca se me dio bien del todo dar discursos, levantarme y hablar delante de toda la clase… A mí eso siempre me dio mucho palo y por una parte, pues el competir te obliga a lidiar con un sentimiento o una especie de nervios bastante parecidos a todo eso y por otra, es algo que elegí y que me engancho mucho. Entonces la competición para mí siempre ha ido de la mano de los entrenamientos, ya que desde que empecé a entrenar empecé a competir.

Ana descubrió el jiu-jitsu en Estados Unidos. Foto: Anamayor_bjj
P.- Y ahora, ¿cómo es tu día a día en Estados Unidos?
R.- Depende mucho de si estoy de viaje por entrenos, por competiciones o por trabajo. Cuando digo trabajo ahora mismo me refiero a impartir seminarios de jiu-jitsu. Porque aparte sí tengo un trabajo a tiempo completo en una empresa de software. Entonces, obviamente tengo que compaginar bastantes cosas. En verdad el horario lo tengo bastante liado siempre pero bueno, en verdad es lo que me gusta y prefiero estar súper ocupada haciendo lo que de verdad me apasiona que tener todo el tiempo libre del mundo, pero odiar lo que hago.
FUTURO
P.- Con estos logros tan recientes, ¿te marcas algún objetivo en el futuro?
R.- Pues obviamente, a nivel de ganar títulos, pues aún me quedan títulos por ganar. El 1 de noviembre voy a estar en el campeonato europeo sin kimono en Roma, entonces voy a intentar ganar ese porque nunca lo he hecho. Luego, al mes siguiente, en diciembre, es el mundial sin kimono, así que tres cuartos de lo mismo porque tampoco lo he ganado. Entonces esos dos objetivos a corto plazo me los marco. Si hay títulos por los que aún no he competido, entonces, obviamente nunca los he ganado y quiero hacerlo.
P.- ¿Y un sueño que cumplir?
R.- Me encantaría vivir exclusivamente del jiu-jitsu.
Hay bastantes maneras de ganar dinero en el jiu-jitsu, pero hay que tener cabeza para organizarse
P.- ¿Y es difícil conseguirlo?
R.- Primero hay que tener cabeza porque te pueden pagar por competir, por ganar o dependiendo la organización, te pagan por finalizar en vez de ganar porque se acaba el tiempo. Pero luego además puedes dar clases, clases privadas, seminarios donde te contratan o aparte puedes grabar materiales de aprendizaje donde enseñas posiciones o técnicas y la gente que quiere estudiárselas se los compra o se suscribe. Y aparte, los sponsors y los patrocinadores. Entonces hay bastantes maneras de ganar dinero en el jiu-jitsu, pero hay que tener cabeza para organizarse todo eso. Porque como atleta en cualquier momento te puedes lesionar o igual pasas una mala racha y no estás compitiendo bien. A la hora de pensar en dedicarse a esto a tiempo completo, para mí por lo menos hay que tener cuidado y hay que tenerlo todo muy bien planificado. Entonces ahora quiero estar en una época como de transición donde hago más hincapié en profesionalizar todo y en abrirme paso entre todos para intentar dar más seminarios, negociar más contratos con patrocinadores… de cara, pues en algún momento dejar mi trabajo y dedicarme a tiempo completo a esto.
P.- Ya por último, si pudieras enviarle un mensaje a esa Ana pequeña de la que has hablado antes, ¿qué le dirías?
R.- Que no hay que tener miedo de estar orgullosa de una misma y aparte de que el mundo sepa que estás orgullosa de ti misma.