En la Fórmula 1 moderna, unas pocas milésimas de segundo pueden definir carreras y campeonatos, el éxito ya no depende únicamente del talento del piloto o del rendimiento mecánico del monoplaza.

Hoy en día, la tecnología es el combustible que impulsa cada victoria, y la inteligencia artificial es el nuevo ingeniero de pista en cada vez más escuderías que no quieren dejar pasar la oportunidad de mejorar su rendimiento.

Así lo demuestra McLaren, que desde 2022 ha tejido una alianza estratégica con Google que va más allá del marketing para tratar de reinventar su forma de competir.

Así es una parada en boxes en Fórmula 1

Lejos de limitarse a una mera colaboración de marketing -aunque los logotipos de Android y Chrome brillen en los monoplazas y en los monos de los pilotos-, la sinergia entre ambas compañías se ha convertido en un caso de estudio.

Cómo es la alianza

El punto de partida de esta asociación fue la incorporación de dispositivos Android 5G y Google Chrome en las operaciones cotidianas del equipo.

Desde entrenamientos libres hasta la vuelta final del Gran Premio, estos recursos ofrecen a ingenieros y estrategas acceso instantáneo a información crítica.

Uno de los ejemplos más espectaculares de esta integración tecnológica fue la parada en boxes récord durante el Gran Premio de Qatar en 2024.

La parada perfecta de McLaren en Qatar

El equipo completó el pit stop en tan solo 1,8 segundos, una cifra que desafía los límites físicos. ¿El secreto? Análisis en tiempo real de vídeo de alta definición, alimentado por los dispositivos Android del staff, que permiten detectar milimétricamente dónde se puede ahorrar tiempo.

Pero esta proeza es solo la punta del iceberg. McLaren se apoya en Google Cloud para procesar más de un terabyte de datos por carrera.

Estos datos provienen de sensores instalados en el coche, el piloto e incluso del análisis por voz de las conversaciones por radio. La inteligencia artificial transforma esa avalancha de datos en decisiones estratégicas durante la propia carrera.

Leclerc y Verstappen, durante el GP de Spa.

La IA que predice carreras

Uno de los activos más impresionantes de McLaren es su capacidad de simulación previa. Antes de cada fin de semana de competición, el equipo ejecuta hasta 300 millones de simulaciones diferentes.

Gracias a plataformas como BigQuery y Looker, pueden anticipar escenarios, definir la estrategia óptima y prever desde la degradación de los neumáticos hasta posibles interrupciones por coche de seguridad.

Durante el Gran Premio de Miami 2024, estas simulaciones fueron clave en la victoria de Lando Norris. McLaren planificó una estrategia que supo capitalizar una bandera amarilla y realizar la única parada del piloto en el momento justo.

El talento de Lando Norris se combinó con un análisis computacional masivo, imposible de igualar sin Inteligencia Artifical. La mezcla del talento humano y tecnología punta está dando sus éxitos a la escudería británica.

La marca 'Chrome', en el chasis del McLaren F1

La marca ‘Chrome’, en el chasis del McLaren F1

McLaren

Del box a la oficina

La inteligencia artificial no solo acelera el coche. También mejora los procesos internos del equipo. Con un límite presupuestario estricto en la F1 (140 millones de dólares por temporada), la eficiencia es vital.

McLaren utiliza IA para automatizar tareas, optimizar recursos humanos y mejorar procesos logísticos, desde la preparación del coche hasta la comunicación interna.

Esta tecnología ha revolucionado la manera en que los equipos interpretan lo que ocurre durante una carrera. Herramientas como el TCDS (Team Content Delivery System) han reducido el tiempo de entrega de datos de nueve a menos de cinco segundos, permitiendo decisiones tácticas casi instantáneas.

Además, los gemelos digitales permiten simular componentes como la aerodinámica o el desgaste de piezas sin siquiera encender el motor. Esta capacidad de anticipación también reduce costes y acelera los ciclos de desarrollo del coche.

'Concept car' de la FIA para la temporada 2026 de Fórmula 1

La IA invade la F1

El uso de inteligencia artificial se extiende a áreas tan diversas como la ciberseguridad (con plataformas como SentinelOne), el marketing (usando datos de más de 700 millones de seguidores globales) o el diseño de trofeos personalizados mediante IA generativa.

Incluso en el desarrollo de nuevas decoraciones como el «Chrome Shines Again», la fusión de la identidad visual de McLaren con Google Chrome aportó un enfoque fresco a la imagen del equipo.

La F1 se ha convertido así en un laboratorio de innovación. La IA no solo predice tiempos, también permite aplicar edge computing, realidad aumentada, análisis predictivo de seguridad, e incluso la creación de robots interactivos en eventos como el GP de Bahréin 2025.

Lluvia en el circuito de Spa del Gran Premio de Bélgica

Lluvia en el circuito de Spa del Gran Premio de Bélgica

Reuters

El futuro ya está aquí

Google continuará integrando nuevos dispositivos Pixel en la operativa del equipo, mientras que McLaren buscará reforzar su ventaja competitiva no solo con mejoras en pista, sino también con procesos operativos más ágiles en el Centro Tecnológico McLaren en Woking.

Además, se explorarán nuevas formas de fidelización del aficionado mediante el análisis de emociones en tiempo real, la realidad aumentada en transmisiones o las competencias virtuales gamificadas. El objetivo no es solo correr más rápido, sino también conectar mejor con quienes lo ven.

«En la F1, los márgenes son tan pequeños que si no innovas, vas hacia atrás. La IA no reemplaza a nadie, pero sí amplifica el potencial de todo el equipo«, afirmó Edward Green, jefe de tecnología comercial de McLaren.

La escudería Andretti - Cadillac propuesta para la Fórmula 1

La alianza entre McLaren y Google está transformando el automovilismo tal como lo conocíamos. En un entorno donde cada milisegundo importa, la capacidad de analizar, predecir y ejecutar en tiempo real es un arma letal.

Pero más allá del rendimiento, esta unión representa un nuevo paradigma: una F1 donde la tecnología no es un complemento, sino el corazón de la competición. McLaren no corre solo con gasolina, corre con datos. Y Google es su copiloto.