Miguel Ángel Galán Castellanos ha presentado una segunda ampliación de la denuncia contra Javier Tebas, presidente de LaLiga, en la que eleva a dos las infracciones muy graves atribuidas al dirigente.
A las acusaciones ya presentadas se les suma la censura audiovisual durante las protestas de los jugadores por el partido de Miami y falta de transparencia y extralimitación competencial al promover ese encuentro sin la preceptiva autorización del Consejo Superior de Deportes (CSD).
El escrito, registrado este domingo ante el CSD, constituye una ampliación de la denuncia que Galán ya había interpuesto en agosto, cuando acusó a Tebas de abuso de autoridad y atentado al decoro deportivo tras insultar públicamente a un extrabajador de LaLiga.

En esta ocasión, la asociación que preside el denunciante reclama la destitución inmediata de Tebas por vulnerar los principios de neutralidad, objetividad y transparencia que rigen las entidades deportivas.
Protesta silenciada
La nueva denuncia parte de los hechos ocurridos durante la jornada 9 de La Liga, cuando los futbolistas realizaron una protesta pacífica -un parón de 15 segundos al inicio de los partidos- en rechazo a la decisión de celebrar un encuentro oficial en EE.UU.
Según la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), la medida de protesta pública contó con el apoyo de todos los capitanes de Primera División.
Sin embargo, durante el Real Oviedo – Espanyol, la realización televisiva de LaLiga evitó mostrar ese momento y mantuvo un plano del exterior del estadio durante los segundos en que se produjo la protesta.

La imagen del Carlos Tartiere que se pudo ver en TV mientras los jugadores protestaban.
Tras ello, se conoció que LaLiga instruyó deliberadamente a la producción audiovisual para ocultar la escena.
Un hecho que, según Galán, viola el derecho constitucional a la libertad de expresión de los jugadores y la Ley 21/1997 de Retransmisiones Deportivas, que prohíbe censurar contenidos de relevancia informativa.
Además, el presidente de LaLiga advirtió por carta a la AFE de posibles «consecuencias indeseadas» para los futbolistas si mantenían la protesta.
Algo que la asociación considera un acto intimidatorio y un abuso de autoridad contemplado en el artículo 76.2.c) de la Ley 10/1990 del Deporte.
Falta de transparencia
El segundo eje de la denuncia se centra en la organización del partido Villarreal – Barcelona en Miami, prevista para el próximo mes de diciembre.
La AFE acusó a Tebas y a LaLiga de falta de transparencia, asegurando que no se les facilitó información pese a haberla solicitado dos meses antes.
El sindicato recuerda que el artículo 61 de la Ley 39/2022 del Deporte obliga a garantizar la transparencia informativa y el acceso a datos relevantes para los futbolistas.
Sin embargo, LaLiga no convocó reuniones ni entregó documentación antes de anunciar oficialmente el encuentro.

Cartel oficial de LaLiga para el Villarreal – Barça en Miami
Para Galán, autorizar unilateralmente un partido fuera de España sin el visto bueno del CSD y sin el informe federativo obligatorio vulnera la Ley 10/1990, el Real Decreto 2075/1982.
Según esta, se exige el permiso previo para competiciones internacionales, y también el artículo 14 de la Ley 39/2022, que reserva al CSD la competencia exclusiva en actividades deportivas internacionales.
El escrito también alude al Convenio Colectivo LaLiga-AFE, que limita los desplazamientos a un máximo de 72 horas, y al Modelo Europeo del Deporte aprobado por el Parlamento Europeo, que insta a impedir que se disputen partidos nacionales fuera del continente.
Petición de destitución
La Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte solicita al CSD que remita la denuncia al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), órgano competente para incoar un expediente disciplinario.
La petición recuerda la sentencia 128/2023 de la Audiencia Nacional, que obliga al Consejo a trasladar todas las denuncias al TAD sin retenerlas.
Según el escrito, las conductas de Tebas encajan en el tipo de abuso de autoridad y vulneración de derechos fundamentales, pudiendo acarrear inhabilitación de dos a cinco años.
Además de una sanción económica de hasta 650.000 euros y destitución del cargo, conforme a los artículos 75 y 79 de la Ley del Deporte.
Galán fundamenta la gravedad de los hechos en la reincidencia del presidente de LaLiga, recordando que ya fue amonestado públicamente por el TAD en 2024 tras una denuncia del Real Madrid.
El Consejo Superior de Deportes deberá decidir si eleva la denuncia al TAD, que, de admitirse, podría abrir un procedimiento que determine si Javier Tebas incurrió en abuso de autoridad.