Valladolid acogerá esta semana una reunión de expertos en vacunas que pondrán en valor los 50 años del calendario de vacunación en España, con cifras … y datos que despojan de argumentos a las corrientes negacionistas. Una programación establecida a nivel estatal de manera gratuita y de fácil accesibilidad para el ciudadanos que como herramienta de salud pública ha permitido erradicar enfermedades como la viruela, eliminar la poliomielitis y rebajar a mínimos casi intrascendentes los casos de sarampión, difteria, tosferina, tétanos o meningitis. Es lo que prueban las cifras del antes, el durante y el después.
Los expertos aconsejan aumentar hasta los 25 años la vacunación en varones frente al virus del papiloma humano
En ese éxito está, paradójicamente, una de las posibles debilidades de futuro, la de quienes dudan de la efectividad de las vacunas. «Hay que trabajar en la confianza de la vacunación, especialmente entre las nuevas generaciones que no han vivido las enfermedades que estamos previniendo», defiende José Antonio Navarro, copresidente del comité científico del simposio que reunirá a 400 expertos en Valladolid entre este miércoles 22 y el viernes 24 y consultor honorario de la Dirección General de Salud Pública. Las estadísticas sanitarias cifraron en 28.800 los casos de difteria diagnosticados antes de las campañas de vacunación, que en este momento se han reducido a cero, y las 280.000 declaraciones de paperas de 1984 habían bajado a 3.800 en el año 2008. El cálculo que ofrecen los balances sanitarios atribuyen a la implantación del calendario de vacunación haber evitado un promedio de 800.000 infecciones de enfermedades inmunoprevenibles cada año.

Calendario de vacunación colgado en la pared de un centro sanitario de Castilla y León.
A. Mingueza

Es es el camino recorrido por un calendario que cumple este año sus cinco décadas. Empezó de forma tímida, con inmunización frente a tres virus de polio, difteria, tétanos, tosferina, sarampión, viruela y rubeola. Patologías que hoy situamos en un tiempo de carestías y películas en blanco y negro. Aquel calendario de vacunación era infantil. A los 14 años se llegaba a meta. El actual protege frente a 18 enfermedades y se extiende a lo largo de la vida adulta, con una programación base estatal, pero también con diferencias entre autonomías en un momento en el que los expertos plantean ajustes y mejoras sobre las que debatirán en el encuentro de Valladolid.
Jaime Pérez, presidente de la Asociación Española de Vacunología, aboga porque el conjunto de las comunidades extienda hasta los 25 años la posibilidad de que los varones se vacunen frente al Virus del Papiloma Humano (VPH), en lugar de cerrar esa puerta a los 18 años. Este patógeno se transmite en relaciones sexuales y está en el origen del cáncer de cuello de útero, de ano, pene, vagina, vulva y orofaringe. El presidente de los vacunólogos españoles también apuesta por el impulso a la vacunación en centros educativos, porque entiende que «no solo aumenta la cobertura vacunal, sino que reduce inequidades».
Jaime Pérez detecta un margen de mejora en la vacunación de las personas adultas y sobre todo entre los mayores de 65 años, donde apunta hacia dos desafíos: el cansancio y la reticencia vacunal y el impacto presupuestario de introducir nuevas vacunas en un colectivo numeroso y creciente como el que entra en la etapa de la jubilación.

Vacunación intranasal frente a la gripe de un niño.
S. T.

El coste estimado en vacunar a una persona a lo largo de la vida ronda hoy los 1.500 euros. Los expertos defienden su eficacia, tanto en protección de la salud como en ahorro de gasto sanitario a medio y largo plazo, al evitar tratamientos e ingresos hospitalarios. Desde la organización del simposio destacan que el cálculo de vidas que se salvaron en España gracias a la vacuna que logró atajar la cadena de contagios de la covid-19 asciende a 127.000, con una campaña masiva de inmunización que permitió, además, volver a la actividad habitual que había cortado de raíz la pandemia.
En la temporada de inmunización frente a los patógenos respiratorios del otoño-invierno pasado se impulsó la vacunación para frenar contagios del virus respiratorio sincitial (VRS) entre los bebés. Es un agente contagiador que provoca bronquiolitis en lactantes que pueden evolucionar con complicaciones y obligar a la hospitalización. La comparación de cifras de ingresos respecto a temporadas precedentes arrojó que esa vacunación permitió reducir un 75% las estancias hospitalarias por bronquiolitis en niños de meses, que en cifras responden a una neutralización de alrededor de 10.000 hospitalizaciones en planta y UCI en el conjunto de España.
Esa vacuna se va a extender este año entre los mayores de Castilla y León, que conforman la otra horquilla de edad en la que VRS complica los cuadros hasta fraguar diagnósticos de bronquiolitis y neumonías. En el caso de la gripe, se calcula que la vacuna reduce las infecciones un 70%.