El FC Barcelona ha manifestado su descontento por unas imágenes captadas durante el último Clásico. En ellas, Jude Bellingham se dirigió al colegiado tras una acción sobre Pedri González con el gesto y las palabras “¡ni con Negreira!”, según se recogió en la retransmisión de Movistar+. La secuencia se hizo viral y, de acuerdo con la información difundida por Mundo Deportivo, causó “indignación” en el club.

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El Barça entiende que se ha traspasado un límite al producirse una alusión directa al procedimiento relacionado con pagos a José María Enríquez Negreira en pleno partido. Desde la entidad se considera especialmente sensible cualquier mención pública de esta cuestión durante un encuentro, según lo reflejado en dichas informaciones.

Esa referencia de Bellingham ocurrió tras una falta cometida sobre Pedri. En las imágenes, se aprecia al jugador realizando el gesto y pronunciando la frase en presencia del árbitro César Soto Grado. La acción se viralizó y generó debate en las horas posteriores al choque.

Contexto de las declaraciones de Courtois

El enfado del FC Barcelona no se limita a lo sucedido en el campo. También hay malestar por unas declaraciones de Thibaut Courtois previas al Real Madrid-Juventus de la Champions League. En sala de prensa, el guardameta mencionó al presidente del Barça, Joan Laporta, por referirse este a una “mano blanca” arbitral. Courtois comentó: “Dice eso porque lo tiene que decir por el caso Negreira y todo eso. Yo nunca he visto eso, más bien lo contrario, no siento que nos hayan beneficiado en ningún momento”.

Estas palabras forman parte de las referencias mencionadas por el club como motivo de disgusto. La intervención del portero, realizada en un acto oficial de UEFA, es citada entre los elementos que han generado malestar.

Percepciones internas sobre el trato al Caso Negreira

En relación con los comentarios surgidos días antes, en el club no entienden el ruido mediático provocado por unas declaraciones de Lamine Yamal en un evento de la Kings League. El FC Barcelona percibe que esas palabras han dado pie a una “caza de brujas” contra el jugador. El entorno azulgrana sostiene que existe una diferencia de trato cuando las declaraciones proceden desde la plantilla madridista.

En el Barça, las menciones realizadas por Bellingham y Courtois han sido recibidas como una actitud que “traspasa lo deportivo”. El malestar se basa en que las referencias llegan desde ámbitos oficiales y durante un encuentro de máxima rivalidad.

Este escenario tuvo lugar en un contexto de debate arbitral en el Clásico. El partido volvió a presentar jugadas polémicas sujetas a interpretación. Entre ellas un penalti anulado por el VAR, al considerar falta de Vinicius sobre Lamine. La decisión se produjo después de que el árbitro de campo señalara inicialmente el punto de penalti.

Para Real Madrid TV, el equipo blanco volvió a verse perjudicado. Asimismo, se apunta a la falta de precedentes inversos en esa valoración.

Contraste mediático entre el Madrid y el Barcelona

El contraste entre la repercusión que han tenido los comentarios sobre Lamine, enmarcados en la Kings League, y la escasa atención mediática que habrían recibido las alusiones realizadas desde el Real Madrid tanto en rueda de prensa como durante el propio Clásico.

El club azulgrana no entiende que los gestos y comentarios de los futbolistas del Madrid hayan tenido menor recorrido mediático. La entidad percibe una doble vara de medir cuando las declaraciones proceden de un lado u otro.