Por orden de Carlos III, el palacio de Buckingham emitió ayer jueves por la noche un anuncio prácticamente sin precedentes: el hasta ahora príncipe Andrés, segundo hijo varón de Isabel II, será conocido de ahora en adelante como Andrés Mountbatten Windsor, el apellido oficial de la casa de Windsor, y perderá su casa al tener que ceder el arrendamiento de Royal Lodge.

«Su majestad ha iniciado hoy un proceso formal para retirar el título, los honores y distinciones del príncipe Andrés», rezaba un comunicado del palacio de Buckingham. «Hasta la fecha, su contrato de arrendamiento de Royal Lodge le ha proporcionado protección legal para continuar residiendo allí. Ahora se le ha notificado formalmente la rescisión del contrato de arrendamiento y él se trasladará a un alojamiento privado alternativo».

El anuncio se produce casi seis años después de que Andrés fuese apartado de sus funciones oficiales como miembro de la realeza debido a la controversia en torno a su relación con Jeffrey Epstein, el pedófilo declarado culpable. Aunque la implicación de Andrés en el escándalo lleva siendo objeto de debate público desde 2011, los últimos acontecimientos han hecho que su presencia en eventos familiares con otros miembros de la realeza suponga un constante problema para el rey y su hijo, el príncipe Guillermo.

El comunicado de palacio reconoce que las acusaciones llevan años siendo una fuente de controversia, a pesar de los desmentidos de Andrés. “Estas censuras se consideran necesarias, a pesar de que él siga negando las acusaciones en su contra. Sus majestades quieren dejar claro que sus pensamientos y todo su afecto están, y siempre estarán, con las víctimas y los supervivientes de todas y cada una de las formas de abuso”, continúa el comunicado.

Desde palacio se ha confirmado a Vanity Fair que las hijas de Andrés, Beatriz y Eugenia de York, conservarán sus títulos. Además del título de príncipe, al que tenía derecho desde su nacimiento, Andrés también perderá su ducado. Como tal, ya no podrá presentarse como «duque de York», «conde de Inverness», «barón de Killyleagh» o «su alteza real». También será despojado de sus honores, incluida la Nobilísima Orden de la Jarretera y la Gran Cruz de caballero de la Real Orden Victoriana.

Según nos comunica una fuente de palacio, el rey inició el proceso para despojar a su hermano de su condición de alteza real y sus títulos sin hallar oposición por parte de Andrés. El rey cuenta con el respaldo del príncipe de Gales y otros miembros de la familia están de acuerdo en que Andrés debe ser despojado de sus títulos.

Hace dos semanas, Andrés dijo en un comunicado emitido a través del palacio de Buckingham que renunciaría por completo al uso de su título de “duque de York”: «Mantengo mi decisión de hace cinco años de retirarme de la vida pública. Con el acuerdo de su majestad, consideramos que ahora debo dar un paso más. Por lo tanto, no utilizaré más mi título ni los honores que me han sido conferidos». Pero la indignación pública no ha cesado y se ha pedido que se despoje formalmente a Andrés de sus títulos desde el parlamento.

En 2019, en aquella infame entrevista-bomba en el programa Newsnight de la BBC, Andrés dijo a la periodista Emily Maitlis que había cortado todo contacto con Epstein tan pronto como pudo. Pero en las últimas semanas se han filtrado correos electrónicos que mostraban que Andrés continuó en contacto con el pedófilo condenado durante algún tiempo tras haber confirmado que había roto el contacto con él.