El año pasado Richard Gere y su mujer, la española Alejandra, se trasladaron a Madrid para dar comienzo a su nueva vida en la capital. Según expresó el actor, después de seis años viviendo juntos en Nueva York, lo mínimo que podía hacer … por su pareja era devolverle ese mismo tiempo en su país. Sin embargo, este mes de octubre el matrimonio ha desvelado que se han vuelto a instalar en Estados Unidos. Una declaración que sorprendía en nuestro país y que ahora tiene explicación.
Ha sido la revista ‘¡Hola!’, quien también desveló en su edición estadounidense la vuelta a Estados Unidos, la que ha dado a conocer el motivo. Y nada tendría que ver con los impuestos, tal y como se ha insinuado. Tal y como han contado, su mudanza a Nueva York se trata de una decisión en base a la logística de su ocupada vida llena de desplazamientos intercontinentales.
El actor viaja a menudo por trabajo, ya sea por grabaciones o por sus compromisos con The Gere Foundation. Y aunque Alejandra va con él siempre que puede, los niños requieren una estabilidad y se han criado en Estados Unidos. La pareja tiene a Albert, fruto de un matrimonio anterior para ella, Alexander (de seis años) y James (de cinco); además de Homer, el hijo mayor del intérprete, que vive también en el país norteamericano. Por lo tanto, resulta más fácil para ellos volver a establecerse en la casa que tiene el protagonista de ‘Pretty Woman’ en las afueras de la ciudad de Nueva York.
A pesar de que sus planes eran vivir en la casa que se compraron en la Moraleja, para la que incluso hicieron una reforma recientemente, tras pasar el verano en Estados Unidos tomaron la decisión de quedarse a principios de septiembre. «Prácticamente con las maletas hechas», según publica ‘¡Hola!’, y habría sido Alejandra quien tomó la decisión de cambiar de planes por su marido y sus hijos, todo a «última hora». Los niños están de nuevo escolarizados en Estados Unidos y su plan es, de momento, vivir allí pero viajar con frecuencia a su casa de Madrid, que pretenden mantener.
Richard Gere admitía hace solo unos días que su tiempo en España había sido «fabuloso», y que Alejandra había estado «realmente feliz por su familia, sus amigos, su cultura, su ciudad y la comida», señalaba. Aspectos de la cultura española que, sin duda, la gallega habría echado de menos durante sus años pasados en Estados Unidos. Pero el tiempo dirá si vuelven a establecerse en nuestro país y, hasta entonces, ella continuará viajando a Madrid. De hecho, en su agenda está pasarse por la capital en los próximos días para un evento.