Abrir una cuenta bancaria ya no es solo un trámite. En los últimos meses, los bancos españoles han mantenido una guerra por captar nuevos clientes a través de tentadoras promesas de dinero en efectivo, regalos o mejores condiciones financieras, ofreciendo desde vuelos hasta cheques de cientos de euros a los nuevos clientes. Sin embargo, detrás de cada promoción suele esconderse una realidad más compleja: requisitos de domiciliaciones, compromisos de permanencia y penalizaciones si no se cumplen todas las condiciones.
Kutxabank ha sido una de las últimas entidades en sumarse a esta tendencia. Su propuesta para jóvenes de entre 18 y 30 años consiste en un vuelo de ida y vuelta a un destino nacional o europeo al abrir una cuenta online, además de contratar una tarjeta sin comisiones y activar Bizum. La promoción, limitada a los 4.000 primeros clientes, exige un compromiso de permanencia de 12 meses. Además, ni el destino ni las fechas se eligen libremente. El banco ofrece tres alternativas en cada caso. Más allá del vuelo, el banco recompensa con 400 euros en efectivo a quienes domicilien una nómina de más de 1.800 euros al mes. Si la nómina es de al menos 800 euros, pero inferior a 1.800, bonificará 200 euros.
CaixaBank combina una remuneración baja con condiciones exigentes. Ofrece 250 euros por abrir la cuenta y domiciliar en ella una nómina superior a 1.500 euros, tres recibos y usar la tarjeta al menos tres veces al trimestre. Si la nómina es inferior, pero de más de 900 euros, la bonificación es de 150 euros. Estas condiciones deben mantenerse durante 24 meses, y además el cliente debe seguir vinculado al banco otros 24 meses con al menos 5 euros en la cuenta o en un depósito. En total, se requieren cuatro años de permanencia para cobrar los 250 euros completos, con penalizaciones proporcionales si no se cumplen todos los requisitos.
El Santander ofrece 400 euros a quienes abran una cuenta online, pero solo se perciben si se domicilian dos recibos mensuales y se cuenta con una nómina de al menos 2.500 euros. Considerando que el salario medio en España es de 1.112 euros en 14 pagas, pocos clientes podrán cumplir la promoción completa. Eso sí, en caso de que la nómina alcance al menos 600 euros, la bonificación del banco será de 300 euros.
Cajamar ha relanzado esta semana una promoción por la que paga hasta 750 euros a los clientes solo por domiciliar la nómina. Pero para conseguir esta remuneración se debe tener unos ingresos de al menos 4.000 euros y mantenerlos durante 36 meses (tres años). Para nóminas inferiores, también ofrece un cheque a los nuevos clientes, pero es menos cuantioso: 300 euros si la nómina es de entre 1.200 y 1.999 euros y de 500 euros si los ingresos son de entre 2.000 y 3.999 euros.
Entre las ofertas más generosas en términos monetarios se encuentra la del BBVA. La entidad ofrece hasta 760 euros al año a los nuevos clientes de su cuenta online, pero para recibir el dinero hay que cumplir con varios requisitos mes a mes: domiciliar una nómina de al menos 800 euros (por este concepto el banco paga hasta 400 euros al año), domiciliar recibos (el abono es de 10 euros al mes), usar la tarjeta de débito (otros 10 euros al mes), y activar y utilizar Bizum (otros 10 euros mensuales). No existe compromiso de permanencia, pero si en algún mes no se cumplen las condiciones, las bonificaciones se suspenden y solo se reactivan cuando se vuelvan a cumplir. En otras palabras, no es un cheque único, sino un pago condicionado mes a mes durante todo un año, por lo que para algunos clientes puede ser complicado cumplir todos los requisitos de remuneración máxima a lo largo de 12 meses.
En el último año, la banca española ha ido retirando de sus escaparates las ofertas que remuneran por mantener dinero en la cuenta o contratar un depósito, a medida que el Banco Central Europeo (BCE) ha ido aplicando recortes en los tipos de interés. En 2023, cuando el supervisor bancario elevó las tasas para hacer frente a la inflación, los bancos lanzaron promociones que pagaban por el ahorro. En general, la única condición era ser nuevo cliente y mantener el dinero en la cuenta. También había ofertas adicionales para quienes domiciliasen una nómina. Pero con el tiempo han ido aumentando el número de requisitos.
La apuesta actual de la banca pasa por promociones dirigidas a captar nuevos clientes. Se trata de una estrategia más rentable para las entidades, ya que, además de que el cliente mantiene un saldo mínimo en la cuenta, se le vincula a otros productos durante al menos un año, que suele coincidir con la duración de la permanencia exigida. Además, al requerir el uso de tarjetas de débito, los bancos generan ingresos por cada compra realizada a través de la comisión que abonan los comercios, reforzando así la rentabilidad de estas promociones.
Más allá las ofertas que imponen requisitos complicados de cumplir, algunos bancos sí tienen propuestas accesibles. Entre ellas, destacan Abanca y Bankinter. Abanca entrega un cheque de 500 euros a quienes domicilien una nómina de al menos 1.200 euros en su cuenta online, sin necesidad de contratar otros productos ni mantener la cuenta un tiempo mínimo. Bankinter ofrece un 5% TAE durante el primer año por hasta 10.000 euros depositados, y un 2% TAE el segundo año, abonando semestralmente los intereses y sin requisitos de permanencia.
Ibercaja destaca por la rentabilidad de su cuenta remunerada, de un 5,09% TAE durante un año para los primeros 12.000 euros de saldo, con condiciones limitadas a domiciliar ingresos recurrentes y realizar algunas compras con tarjeta. Solo si se incumple alguna condición mensual se aplican comisiones y se deja de generar intereses. Por su parte, el Sabadell ofrece un 2% TAE sobre un saldo máximo de 20.000 euros y 400 euros adicionales si se domicilia la nómina y se activa Bizum.
Banca March ofrece una remuneración del 2% TAE para los nuevos clientes de su cuenta digital que domicilien la nómina o pensión, hasta un saldo máximo de 60.000 euros. En este caso, la entidad no pide más requisitos para acceder a esa promoción.