Manuel Pellegrini ha pasado de devolver la pelota de su posible renovación al tejado del Real Betis, dejando claro en público que la decisión no depende de él, a bromear en las últimas ruedas de prensa, donde fue el concursante más arquetípico de ‘Pasapalabra‘. El chileno argumentaba hace nada que la incertidumbre puede convertirse en una distracción para el vestuario, al tiempo que su círculo más cercano se extrañaba en privado de la dilación de los dirigentes verdiblancos, que están llevando el asunto personalmente, sin intervención directa en esta ocasión de Manu Fajardo, Álvaro Ladrón de Guevara, Ramón Alarcón o Joaquín Sánchez, claves en la contratación de la mayoría de refuerzos. Fueron Ángel Haro y José Miguel López Catalán quienes iniciaron los contactos entre finales de primavera y principios del verano pasado, además de los encargados de enfriar las negociacioes, dando pábulo a todo tipo de interpretaciones.

Desde el entorno del ‘Ingeniero‘ desmentían recientemente ‘off the record’ que lo que les separara fueran la duración del nuevo contrato (se especuló con que el interesado quería dos años más, mientras que en La Cartuja se plantaban en 1+1, condicionando el segundo a la clasificación para la Champions League y/o la consecución de otro título) o el salario. El dinero, así en abstracto, sí es un factor determinante, aunque más en lo referente a la inversión necesaria para apostar con argumentos por la máxima competición continental sin descuidar LaLiga o en el mantenimiento de la ‘columna vertebral’ de la plantilla, conservando la filosofía de ‘vender para crecer‘, pero eligiendo efectivos menos determinantes.

Según ha podido confirmar ESTADIO Deportivo, el entendimiento entre el Real Betis y Manuel Pellegrini está mucho más encauzado que estas semanas previas. Fuentes bien informadas apuestan por un acuerdo inminente (hay quien defiende que «antes de que terminen las Navidades«, aunque reina la cautela entre bambalinas), incuestionablemente más cerca que durante el presente arranque de temporada, con un nuevo listón fijado en 2028. Habrá que esperar a conocer la letra pequeña para comprobar quién cede más y quien menos, si bien lo importante es que ambas partes han hecho saber a la otra su deseo de prolongar la vinculación del santiaguino más allá de los seis años, por encima de alternativas tanto para el míster como para la institución heliopolitana.

Pellegrini aumenta la incertidumbre sobre su renovación y señala de nuevo al BetisPellegrini aumenta la incertidumbre sobre su renovación y señala de nuevo al BetisSólo Pellegrini puede con Pellegrini: su renovación, un Asunto de Estado en el BetisSólo Pellegrini puede con Pellegrini: su renovación, un Asunto de Estado en el BetisPellegrini anuncia reuniones para su renovación en el Betis y revela la lesión de Ricardo Rodríguez Pellegrini anuncia reuniones para su renovación en el Betis y revela la lesión de Ricardo Rodríguez  El año 2028, marcado en el calendario del ‘Ingeniero’

En 2026 habrá elecciones a la presidencia de la ANFP (Asociación Nacional de Fútbol Profesional), que ocupa un Pablo Milad a la par rector del citado organismo y de la Federación Chilena de Fútbol, entes que, tras la intervención del Senado del país andino con la aprobación de una Ley de Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales, tendrán que separarse definitivamente. Se lucha en Santiago por evitar el conflicto de intereses que supone una de las presuntas causas del bajón experimentado por el balompié en Chile. Este mes de noviembre de 2025, además, se celebran los comicios gubernamentales, de tal manera que se espera una sucesión de movimientos que, si se producen los resultados esperados, allanarían el desembarco de Manuel Pellegrini en ‘La Roja‘. Exige el ‘Ingeniero‘ una reforma total de las estructuras e instituciones que sustentan el fútbol chileno, razón por la que habría declinado ser el sucesor ahora de Ricardo Gareca. Mantiene, no obstante, el actual responsable del Real Betis su sueño de retirarse dirigiendo la absoluta de su nación, con el ciclo 2028-2030 marcado en el calendario: justo tras la próxima Copa América, cuya fase de clasificación arrancará en septiembre del año próximo, y antes de las Eliminatorias para el Mundial de 2030. Ése es su objetivo realista.