Especialistas del Ministerio de Salud Pública (Minsap) admiten que La Habana enfrenta una “crítica situación” por arbovirosis, aunque sin cifras precisas sobre contagios en municipios como Marianao, uno de los más afectados por el dengue y el chikungunya.

Según un reporte del Canal Habana, en el municipio de Marianao “no se contabilizan los casos exactos lo cual es preocupante por la complejidad epidemiológica”, algo que impide dimensionar con claridad la magnitud del brote.

Autoridades sanitarias locales reconocieron que la capital atraviesa una etapa “compleja”, marcada por el incremento de los casos febriles y la saturación de los servicios de salud.

De acuerdo con Juan Ariel Reyes, director general de Salud en el capitalino municipio, de conjunto con autoridades a distintos niveles, se ha logrado incorporar trabajadores de las empresas, del gobierno y el Partido Comunista en dos brigadas, una de tratamiento adulticida y otra de tratamiento focal y de abatización, además de ayudar con las pesquisas.

Agregó que ello les ha ayudado a “identificar las zonas donde hay más movimiento de casos febriles y trazar cuadrantes en las áreas de salud, que es la base a donde estamos trabajando semanalmente”.

Por su parte, la directora municipal de Higiene y Epidemiología, Caridad Pérez, afirmó que “en este momento estamos disminuyendo los casos febriles con relación al mes anterior”, si bien no aportó cifras que permitan corroborar lo mencionado.

Se refirió al despliegue de brigadas de tratamiento adulticida, fumigación intradomiciliaria y campañas de pesquisa por cuadrantes para intentar frenar el avance de los mosquitos.

Las labores de fumigación se concentran en los consejos populares Zamora-Coco Solo, Pocito-Palmar, Pogolotti-Santa Felicia y Libertad, priorizando las zonas con mayor “movimiento de febriles”.

El Minsap ha insistido en la importancia de la detección temprana. “Ante el primer síntoma, el ciudadano debe acudir al médico o policlínico más cercano”, indicó Leonor Cortázar, vicedirectora general de Asistencia Médica en Marianao.

Precisó que los niños menores de dos años y las embarazadas deben ser remitidos de inmediato a hospitales especializados, mientras que los pacientes con comorbilidades requieren vigilancia estrecha.

Pese al llamado a la prevención, en la población crece la preocupación por la falta de transparencia y datos oficiales.

La ausencia de cifras concretas impide conocer la magnitud del brote y evaluar la eficacia de las medidas implementadas.

En varios barrios de la capital, vecinos denuncian que la fumigación es irregular y que persisten los focos de mosquitos en zonas críticas, agravados por la acumulación de basura, la escasez de agua potable y la precariedad en la gestión de desechos.

Los casos de dengue y chikungunya se ha disparado en Camagüey, donde las autoridades sanitarias califican el incremento de “exponencial” y advierten que los municipios de Florida, Carlos Manuel de Céspedes y la capital provincial concentran la mayoría de los contagios.

La central provincia de Sancti Spíritus también registra un incremento alarmante de casos de dengue y la circulación creciente del chikungunya, admitió recientemente el periódico oficial Granma.

La viceministra de Salud Pública, Carilda Peña García, confirmó días atrás la existencia de más de 20,000 casos de chikungunya en Cuba, además de un incremento notable de dengue y otras arbovirosis.

Las provincias más afectadas -La Habana, Camagüey, Cienfuegos, Artemisa y Villa Clara- concentran el 62 % de los focos del mosquito Aedes aegypti.