Luis Rubiales reapareció este martes en ‘El Chiringuito’ con una entrevista en la que cargó con dureza contra los principales dirigentes del Gobierno por sus reacciones al beso no consentido a Jennifer Hermoso tras la final del Mundial.

El expresidente de la RFEF respondió a las declaraciones que en su día hicieron Pedro Sánchez, Yolanda Díaz e Irene Montero, y que fueron reproducidas en el programa para contextualizar la polémica.

Pedro Sánchez afirmó entonces: “Lo que vimos fue un gesto inaceptable. Creo también que las disculpas que ha dado el señor Rubiales no son suficientes. Incluso creo que no son adecuadas y que, por tanto, tiene que continuar dando pasos el señor Rubiales”.

Por su parte, Yolanda Díaz apuntó: “Desde Sumar, la condena más rotunda a lo que vimos ayer y seguimos pidiendo la dimisión del señor Rubiales, que en este caso ha vejado y, sin lugar a dudas, ha agredido a una mujer. Esta persona debe dimitir”.

Irene Montero añadió: “Cualquier acto sexual no consentido es violencia sexual. Rubiales no puede continuar en su cargo y, sobre todo, Jenni Hermoso, por ella y por todas las mujeres, debe saber que no está sola”.

Rubiales tomó la palabra tras esas declaraciones y respondió con un ataque directo a la exministra: «Probablemente Irene Montero se aprendió el nombre de Jenni Hermoso ese día porque no se sabía el nombre de ninguna ni la entidad del fútbol femenino jamás.»

Y amplió su crítica al Ejecutivo con una referencia a Pedro Sánchez: «Es curioso ver a estos tres políticos, al primero de ellos, el presidente del Gobierno, que me pide que dé pasos cuando él ha dicho directamente a todos los electores que era ilegal hacer una amnistía.»

Rubiales se mostró desafiante, reafirmando su discurso de que todo fue “una caza política y mediática”, y negando que el gesto con Hermoso tuviera “ninguna connotación sexual”.