El silencio que siguió al final del partido fue más elocuente que cualquier palabra. Álex de Miñaur se marchó de la pista central de las ATP Finals con la cabeza baja, el gesto desencajado y la sensación amarga de haber dejado escapar una oportunidad irrepetible. El australiano, uno de los jugadores más consistentes del circuito, había estado a solo unos juegos de derrotar a Lorenzo Musetti, pero el italiano logró darle la vuelta al marcador en un final que rozó lo cruel.

La derrota, más allá de los números, dejó una huella emocional profunda en De Miñaur, que compareció en rueda de prensa visiblemente afectado y con un discurso inusualmente sincero. “Es mejor que no exprese lo que siento ahora mismo porque mis pensamientos son bastante oscuros”, comenzó diciendo, con la voz entrecortada. “Este año he tenido un montón de partidos que debería haber ganado y no lo hice. Esto no puede seguir ocurriendo. Si quiero seguir mejorando, no puedo perder estos partidos. Me está afectando mucho mentalmente. No sé cuántas veces más podré soportar una derrota como esta. Debo solucionarlo cuanto antes.”

De Miñaur resta una pelota.

De Miñaur resta una pelota.

Sus palabras resonaron con fuerza. No es habitual que un jugador de su nivel, uno de los más trabajadores y disciplinados del circuito, hable con tanta honestidad emocional sobre el coste mental del deporte de élite.

Un partido que duele más que una derrota

De Miñaur comenzó el encuentro titubeante, perdiendo el primer set ante un Musetti inspirado por el apoyo del público local. Sin embargo, el australiano reaccionó con la determinación que lo caracteriza, igualando el marcador y dominando el arranque del tercero. Con un break de ventaja y el ritmo del partido en su mano, todo apuntaba a una victoria que lo mantendría con opciones reales de clasificación a semifinales. Pero el guion cambió de golpe.

Musetti, alentado por un público volcado, rompió el servicio de De Miñaur en el momento clave y terminó imponiéndose en un desenlace frenético. La frustración del australiano no viene dada solo por la derrota, sino por la repetición de un patrón que viene arrastrando todo el año. De Miñaur ha perdido varios partidos en los que estuvo a punto de ganar, una tendencia que ha minado su confianza y su estabilidad mental.

Musetti pega de revés.

Musetti pega de revés.Antonio Calanni

Con esta derrota, De Miñaur queda en una posición delicada dentro de su grupo de las ATP Finals. Para mantener vivas sus opciones de avanzar a semifinales, deberá vencer a Taylor Fritz en su último partido y esperar que Carlos Alcaraz derrote a Musetti. Un escenario complicado, pero no imposible.