Los espectadores congregados este domingo en el green del hoyo 5 del Royal Porthcawl GC han vivido en minutos uno de los momentos más entretenidos en la historia del golf durante la 4ª jornada del British Open, el quinto y último Grand Slam femenino de la temporada, aún en juego. 

Cuando han llegado al tee de salida la australiana Stephanie Kyriacou y la inglesa Mimi Rhodes ha empezado un espectáculo tal que las dos jugadoras han estado a punto de conseguir sendos hoyos en uno en ese par 3 de 194 metros. 

Kyriacou ha golpeado primero y ha dejado su bola a dos dedos del agujero. De haber entrado, habría sido el segundo ace de la semana para la australiana después del logrado en la segunda jornada en el hoyo 8, de 112 metros.

Stephanie se ha quedado esta vez sin hoyo en uno, pero su bola quieta en el green ha permitido que sí lo haya conseguido su compañera de partida, Mimi Rhodes, cuya bola, también perfectamente dirigida hacia bandera, ha entrado directamente al hoyo porque antes, cual carambola de billar, ha tocado la bola de Kyriacou. Sin esa colaboración externa, la bola de la inglesa habría pasado de largo y acabado algo más alejada del hoyo.

Es el segundo ace de Rhodes esta temporada en el circuito europeo después del conseguido en junio en el Open de Tenerife disputado en el Abama Golf. También es el cuarto hoyo en uno este año en los torneos del Grand Slam contando el del viernes pasado de Kyriacou, el de la estadounidense Brianna Do en el KPMG Women’s PGA Championship y otro de la irlandesa Leona Maguire en el Evian Championship.

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A falta de seis hoyos, la japonesa Miyu Yamashita sigue como líder del British con un golpe de ventaja sobre la inglesa Charley Hull. La española Paula Martín ha hecho una última vuelta de 68 golpes que le coloca provisionalmente dentro del top-10 y se ha asegurado el Premio Smyth Salver como mejor amateur del torneo.