La reaparición televisiva de Kiko Rivera en ‘¡De Viernes!’ ha removido los cimientos del clan Pantoja. Después de cuatro años de silencio, el DJ decidió hablar sin tapujos sobre su ruptura con Irene Rosales, su distanciamiento de Isabel Pantoja y, sobre todo, … su complicada relación con su hermana Isa. Las consecuencias no se han hecho esperar: la hija pequeña de la tonadillera atraviesa uno de sus momentos más delicados tras escuchar a su hermano reconocer públicamente el daño que le causó.

«Le diría que la quiero mucho. Sigue siendo mi niña pequeña. Ya cuando llegó a mi vida, me cambió la vida a mejor. Siento no haber podido estar a la altura de lo que ella esperaba de mí», confesaba Kiko Rivera en la entrevista que ha dado la vuelta a todos los platós. Por primera vez, el hijo de Isabel Pantoja admitía los episodios más oscuros de su relación con Isa, aquellos que durante años negó o justificó.

El músico habló sin rodeos del incidente que marcó un antes y un después entre ambos: aquel en el que, tras descubrir que su hermana había mantenido relaciones con su novio adolescente, decidió «castigarla» rociándola con una manguera de agua helada en Cantora. Isa tenía apenas 18 años. «Fue un error horrible», lamentó Kiko, recordando que entonces «no llevaba la vida más adecuada».

Las palabras de su hermano han tenido un impacto devastador. Según ha revelado ‘Lecturas’, Isa Pantoja fue captada por los fotógrafos rota en lágrimas y arropada por su marido, Asraf Beno, durante una pausa en la grabación del talent show DecoMasters, que se rueda en Valencia. «Isa tuvo que detener la grabación. Rompía en llanto constantemente y el equipo decidió darle un descanso. Asraf no se separó de ella en ningún momento», reveló Luis Pliego, director de la citada revista.

«El tiempo le está dando la razón»

Kike Calleja, colaborador de Vamos a ver, ha contado cómo ha reaccionado la hija de la tonadillera tras conocer las palabras de Kiko. «Isa lo primero que ha dicho es que por fin el tiempo le está dando la razón y que las cosas se están poniendo en su sitio. Está totalmente en shock, porque no pensaba que su hermano iba a reconocer públicamente esos episodios tan duros», explicó el periodista.

Según Calleja, Isa no ha querido pronunciarse más allá de reconocer que Kiko sí se ha puesto en contacto con ella tras su cumpleaños, aunque no sabe aún si responderle. «Está valorando qué hacer, necesita tiempo. Lo que más le duele es que su hermano vuelva a hablar de ella delante de una cámara en lugar de coger el teléfono», añadió.

Un dolor que vuelve cuando menos lo esperaba

El momento no podía ser más sensible para Isa. Justo cuando se preparaba para celebrar su 30 cumpleaños, rodeada de su marido y sus dos hijos, los recuerdos más traumáticos de su adolescencia han vuelto a salir a la luz. Hace apenas dos años, ella misma relató entre lágrimas aquel episodio en televisión: «Me quedé en ropa interior. Kiko empezó a regarme con agua fría y a gritarme ‘sinvergüenza’. Quería morirme», contó entonces.

Ahora, Kiko asegura que se arrepiente profundamente. «Cometí un error por desesperación. En esa época bebía, salía, no estaba preparado. Fue un episodio horrible que ojalá no hubiera sucedido nunca», admitió el DJ, dejando claro que su intención es tender la mano a su hermana.

Aunque el perdón aún parece lejano, algunos de sus allegados, como su amiga Alexia Rivas, creen que las palabras de Kiko suponen un primer paso. «Si él sigue por esta línea del arrepentimiento, yo veo a Isa abierta a hablar con su hermano», aseguró la colaboradora en ‘Vamos a ver’.

Por ahora, Isa necesita tiempo. Tiempo para procesar, para curar y para decidir si, después de tantos años de dolor, está dispuesta a tender la mano a quien más la hizo sufrir.